Elche (Alicante), 27 sep (EFECOM).- El director general de Estudios de Iberdrola, Isaac Tabor, advirtió hoy de que el coste de generación de las energías consideradas como "limpias" (eólica, biomasa y solar) seguirá siendo considerablemente más elevado que las tradicionales (carbón y gas) hasta, al menos, el año 2030.
Tabor ofreció esta estimación en la jornada de clausura del IV Congreso de Economía Comunidad Valenciana Rey Jaime I, que se celebra desde el martes en la Institución Ferial Alicantina (IFA).
El directivo de Iberdrola manifestó que las compañías podrían a corto plazo "generar electricidad más limpia", lo que beneficiaría al medio ambiente, aunque el problema es que las nuevas fuentes son relativamente recientes y la tecnología no ha sido suficientemente desarrollada para abaratar suficientemente los costes.
Por ello, consideró que la sociedad debería plantearse si se quiere "generar limpio para tener un mejor medio ambiente", aunque esto signifique que "nos va a costar mucho más" porque "no hay forma gratuita de afrontar" los cambios.
A este respecto, explicó que la energía eólica resulta, por término medio, tres veces más cara de conseguir que la proveniente del uso del carbón o del gas, mientras que el coste de la solar se dispara en la actualidad hasta multiplicarse por diez.
Según Tabor, esta situación económica desfavorable a las fuentes energéticas "limpias" se irá corrigiendo paulatinamente como consecuencia de los avances tecnológicos pero comentó que hay estudios que apuntan que no habrá un equilibrio hasta, al menos, 2030.
El directivo de Iberdrola informó de que la factura de la electricidad a los hogares europeos es parecida en la mayor parte de los países, ya que se trata de un sector muy regulado, aunque citó la excepción de Dinamarca, donde los consumidores pagan el doble y provoca que este encarecimiento en la factura reduzca el consumo.
Pese al mayor coste, recordó que las nuevas energías son muy valiosas porque el calentamiento global es un problema ya percibido como "real" por la inmensa mayoría de las sociedades.
Tabor puso de manifiesto que la mitad de los gases de efecto invernadero provienen del transporte y que, aproximadamente, el 40 por ciento se emiten durante la generación de energía eléctrica.
Esto podría paliarse en cierta medida mediante la sustitución de las fuentes energéticas tradicionales, dado que el carbón es una fuente "sucia".
Además, Tabor destacó que las renovables también sirven para paliar el problema de la seguridad energética, que se deriva de la excesiva dependencia de otros países a la hora de conseguir la materia prima, como puede ser el gas. EFECOM
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