Roma, 10 sep (EFECOM).- El administrador delegado de la empresa italiana de hidrocarburos Eni, Paolo Scaroni, viajará mañana a Astana para intentar "desbloquear" el problema surgido por la suspensión de las obras en el yacimiento de crudo Kashagán, decidido por las autoridades.
El anuncio lo hizo hoy el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Massimo D'Alema, quien mostró su confianza en que el diálogo se pueda desarrollar "de manera positiva y lograr una solución".
El Gobierno de Kazajistán ordenó el 27 de agosto y por tres meses la suspensión de los trabajos en Kashagán, el mayor del país y uno de los más grandes del mundo, debido a las graves violaciones a la legislación ecológica por Agip KCO, del que forma parte Eni.
La negociación, explicó el ministro, se "desarrollará a nivel de empresas" y agregó que el compromiso político del Gobierno es crear un clima favorable, aunque nuestra labor no es negociar".
D'Alema esperó que el asunto se resuelva antes de la visita que el primer ministro italiano, Romano Prodi, realice a Kazajistán, el 8 y 9 de octubre.
El viceministro kazajo de Exteriores, Nurla Ermekbayev, que participa en una reunión sobre Asia central celebrada por el ministerio italiano de Exteriores, señaló a la prensa "que existe un grupo de trabajo" y se conocerán "pronto" los resultados de su labor.
Los analistas señalan que la auténtica razón del conflicto reside en el anuncio de Eni de que la producción comercial de Kashagán se retrasará de 2008 hasta 2010 y que el coste del proyecto aumentará de los 57.000 millones de dólares iniciales a 136.000 millones.
El consorcio Agip KCO (Agip Kazakhstan North Caspian Operation Company), fundado en 1997, está integrado por la empresa estatal kazaja KazMunaiGaz, la petrolera italiana Eni, las estadounidenses ExxonMobil y ConocoPhillips, la holandesa Royal Dutch/Shell, la francesa Total y la japonesa Inpex.
Situado en el noroeste del mar Caspio, el yacimiento de Kashagán, con varios pozos subterráneos y una superficie de 5.600 kilómetros cuadrados, tiene unas reservas probadas de 10.000 millones de toneladas de petróleo o 38.000 millones de barriles de crudo, de los cuales son extraíbles entre 9.000 y 13.000 millones de barriles. EFECOM
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