
Madrid, 8 sep (EFECOM).- Los pasajeros de un vuelo de Air Comet con destino a Cancún protestaron hoy en el aeropuerto de Barajas por un retraso de al menos nueve horas en la salida de su avión, y algunos de ellos bajaron desde la zona de embarque hasta pie de avión, donde hablaron con los mecánicos hasta que llegó la Guardia Civil.
Fuentes de la compañía confirmaron que el vuelo 941 con destino a Cancún sufrió un primer retraso debido a la llegada tarde a Barajas del avión correspondiente, y en la revisión previa al siguiente vuelo se detectó una avería "cuyo arreglo se demorará más de lo previsto inicialmente, por lo que se ofreció a los pasajeros ir a un hotel unas horas".
La aerolínea destacó que "en todo momento se ha informado a los pasajeros del problema y se les ha atendido conforme a la normativa vigente, ofreciéndoles comida y posteriormente un hotel".
Los aproximadamente 300 pasajeros del vuelo presentaron reclamaciones por el retraso, y al conocer que tenían que ir a un hotel, la mayoría se negó y protagonizó una protesta en la zona de embarque de la terminal 1 que obligó a personarse a la Guardia Civil.
Varios de los pasajeros, que veían desde las cristaleras su avión aparcado enfrente, a escasos metros, aprovecharon "un descuido" y accedieron por la puerta de embarque hasta la zona del aparcamiento del avión, donde hablaron con los mecánicos durante diez minutos, hasta que una dotación de la Guardia Civil les obligó a regresar con el resto, según relató uno de ellos, José Ignacio.
El avión estaba aparcado junto al edificio terminal, de manera que los pasajero sólo se separaron unos metros del mismo, y permanecieron siempre dentro de la zona de aparcamiento de aviones, sin acercarse a la pistas, según detallaron a Efe fuentes aeroportuarias.
José Ignacio explicó que "un grupo logró llegar hasta pie de avión, aprovechando un descuido, para protestar y para hablar con el personal de la compañía, y un mecánico nos explicó que estaban trabajando a la mayor velocidad posible, pero que esto no es tan fácil de arreglar como un coche".
"Entonces llegó la Guardia Civil y nos dijo que volviéramos a la terminal, lo que hicimos para no causar problemas", añadió.
Este pasajero afirmó que "nadie cree ya lo que dice la compañía, porque desde las 14.00 horas nos ha dicho diferentes cosas, y por eso en principio nos hemos negado a ir a un hotel, hasta que nos han asegurado que a las 23.00 horas nos darán información exacta de la hora a la que volaremos, y que nos iremos hoy, y no mañana". EFECOM
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