La campaña publicitaria de Apple sobre su producto iPhone podría convertirse en la campaña comercial de mayor éxito de la historia, superando los casos del lanzamiento del Ford Mustang en 1964, y la versión Windows 95, de Microsoft.
La mezcla de teléfono móvil y reproductor musical ha generado más cobertura informativa previa a la venta que ningún otro producto, dice Al Ries, presidente de Ries & Ries, una firma de estrategia de marketing, en Atlanta. Michael Gartenberg, analista en JupiterResearch en Nueva York, estima que Apple (AAPL.NQ) gastará 100 millones en el lanzamiento, aproximadamente la mitad de lo que Microsoft gastó para Windows 95.
Mística en torno a Apple
"Apple es una de esas raras marcas que pueden crear una mística en torno a un producto'', dice Matt Williams, un socio de la empresa de publicidad Martin Agency. Crearon un lío que ha cobrado vida propia'', añade.
Apple dio a conocer detalles poco a poco, bromeando con los consumidores para elevar el interés, seguido de su primer anuncio televisivo con el único mensaje de hello'' durante la ceremonia de los Oscar.
Eso quiere decir que buena parte del entusiasmo se produjo por el boca a boca, estrategia que Apple ha dominado magistralmente desde el lanzamiento de su ordenador Macintosh en 1984.
Enormes ventas
La expectativa podría inducir unas ventas de 200.000 unidades en los primeros dos días y tres millones en la segunda mitad de 2007, según las estimaciones más altas de los analistas. La acogida previa podría ser una parte clave de la estrategia de Apple, cuya sede está en California, para entrar en el mercado de la telefonía móvil, casi cuatro veces mayor que el de los PC.