
Martinsa Fadesa empieza la cuenta atrás, tras entregar los administradores concursales su radiografía al juez. ¿El diagnóstico? La parálisis se ha extendido por toda la actividad de la inmobiliaria desde diciembre de 2008. Y es que el grupo sólo ha reducido un 3,4 por ciento su pasivo, mientras que su activo un uno por ciento.
Según el informe de los administradores concursales, ahora, Martinsa Fadesa cuenta con activos valorados en 7.264,65 millones de euros para saldar un pasivo total de 6.905,58 millones, por lo que se deduce que su patrimonio neto es positivo.
Es necesario comparar estas cifras con las que se publicaron en el primer informe concursal en diciembre de 2008 para hacerse una idea de cómo ha evolucionado la compañía durante este proceso. En esa primera radiografía, el pasivo se sitúaba en 7.156 millones de euros, mientras que el activo contabilizó los 6.905 millones de euros.
Durante ese año y medio, donde se han procedido a resolver la incidencias y hacer movimientos en el mercado, si hacemos los cálculos, el pasivo se ha reducido en 251 millones, mientras que el activo bajó en 72 millones procedentes de ventas de viviendas y suelos. Estas cifras de reducción son menores respecto a las registradas en las otras inmobiliarias españolas.
La administración concursal de Martinsa Fadesa presentó el pasado viernes ante el Juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña el informe definitivo sobre la compañía. Se trata del documento que resulta de actualizar el que ya elaboraron en 2008 a partir de las resoluciones dictadas por el juez sobre las alegaciones presentadas al texto original.
Este informe final presenta mayores diferencias sobre los datos facilitados por la inmobiliaria que controla y preside Fernando Martín, cuando hace justo dos años, el 15 de julio de 2008, reconoció su insolvencia ante los juzgados y solicitó la declaración de concurso voluntario.
Comienza una nueva fase
La inmobiliaria y su administración concursal están actualmente pendientes de que el titular del Mercantil de A Coruña emita, previsiblemente antes de que concluya esta semana, el correspondiente auto para admitir a trámite el informe definitivo.
Con este auto se pondrá fin a la primera parte del concurso, a la denominada 'fase común', y arrancará así la correspondiente a la negociación y votación sobre el calendario y las condiciones que la empresa ha propuesto para saldar su deuda.
La aprobación de un convenio de acreedores supone la superación de un concurso y de la tutela judicial. Dado que la fase de convenio se extiende a un plazo de noventa días hábiles, Martinsa podría salir de concurso a finales de este año o comienzos de 2001, en línea con las previsiones del Juzgado y la empresa.
Además, se da la circunstancia de que la última propuesta de convenio presentada por la compañía que protagonizó el mayor concurso de la historia empresarial española tiene asegurado el porcentaje de adhesión que se necesita para que prospere (al menos el 50 por ciento del pasivo total).
Esta propuesta contempla pagar la deuda íntegra (sin quita) en un periodo de ocho años a partir de 2012 y el compromiso de la empresa de entregar acciones a cambio de pasivo en caso de que no consiga saldar sus deuda una vez finalizado este plazo, más dos años de prórroga.