
Hay entidades que ofrecen un 4%... sólo a pie de sucursal. Recorremos cinco grandes ciudades para comprobar hasta qué punto se mejora el interés al negociar.
La guerra del depósito es una guerrilla de ofertas a pie de sucursal. Y es que la primera batalla se está librando precisamente ahí, en las mesas de comerciales y directores de bancos y cajas que, de tapadillo y sin hacer mucho ruido, están ofreciendo a sus clientes rentabilidades de hasta el 4%, una remuneración impensable hace sólo un mes. La mecha la encendió Banco Popular a principios de mes, cuando lanzó sus depósitos Gasol con un entonces imbatible 3,75% a un año para dinero nuevo. Le secundaron Openbank y Sabadell con productos al 4 por ciento para clientes actuales y nuevos.
Pero la sorpresa saltó hace dos semanas, cuando Santander entraba en escena con otro 4% para clientes de toda condición que cuenten con un mínimo de 25.000 euros de inversión. ¿Dónde estaba la novedad? Que no lo anunciaba en ningún sitio. No hay ni cartelería oficial para exhibir en las sucursales. Y Banesto ha empezado a hacer lo mismo esta semana. Ofrece otro 4% para importes mínimos de 40.000 euros. En esta ocasión, y diferencia de la matriz, no impone condición alguna a los clientes, sólo abrir la cuenta corriente preceptiva.
Estas entidades no son sin embargo las únicas que están mejorando la rentabilidad de sus productos a pie de sucursal. Un recorrido por alguna de las ciudades más importantes de nuestro país basta para comprobar hasta qué punto, muchas de ellas están entrando tímidamente en la guerra del pasivo. Sin hacer ruido, sin anunciarlo y sin renovar cartelería.
Por ejemplo La Caixa lo hace en alguna de sus oficinas. Si bien el depósito oficial sólo llega a un 3% a seis o doce meses y se contrata a través de Internet, a los clientes que estén dispuestos a depositar un mínimo de 30.000 euros, les ofrece una rentabilidad que llega al 3,75% a doce meses. Y otras cajas siguen el mismo camino: Cajamar, Caixa Sabadell, Caixa Manlleu, Caixa Penedés y la CAM ofrecen entre un 3,75 y un 4% de 12 a 18 meses.
Una búsqueda a pie de calle
Éste es, en definitiva, el resultado de lo que puede vivirse hoy en varias sucursales de bancos y cajas por toda España. Nuestra versión particular del programa de Cuatro, Callejeros banqueros.
Para empezar, sólo un 2%: Son las 9.00 de la mañana, en una céntrica zona de Madrid. Entramos en una sucursal del BBVA con la intención de saber qué oferta genérica de depósitos tienen a un año, qué nos ofrecen por un capital cercano a los 30.000 euros y qué mejora son capaces de aplicarnos si elevamos la cifra a 100.000 euros. Una constante que se va a repetir en todas nuestras visitas por Madrid y el resto de capitales: Barcelona, Bilbao, Valencia y Valladolid.
Nuestra primera tentativa no cosecha mucho éxito. La comercial de la oficina, nos explica que "tal y como están los tipos en este momento" la rentabilidad máxima a la que podemos aspirar es 2,85% TAE... ¡y hablamos de un producto estructurado! Es decir, el 50% del ahorro en un depósito al 5% a un año, y la otra mitad en preferentes (participaciones del banco sin derechos políticos) que se liquidan a euribor a tres meses. Le decimos que el objetivo es contratar un depósito a plazo fijo, sin riesgo, y ahí, poca cosa: un producto creciente a tres años con el que se termina obteniendo un 2,02% y otro, el Fortaleza, con el que se obtiene un 1,5% hasta el 15 de septiembre de este año.
La percepción de que BBVA no apuesta por depósitos competitivos en estos momentos se confirma en otra de sus sucursales, esta vez en Valladolid. Allí nos ofrecen por un capital de 30.000 euros un 0,95% nominal aproximado a un año, ya que vinculan la remuneración al euribor, informan Rafael Daniel y Enrique Fonseca. A seis meses, la oferta sube a un 2,5% nominal. Y no obtenemos ninguna mejora al elevar a 100.000 el capital.
Pero uno de los casos más sangrantes es el de Caja Laboral. En una sucursal de Bilbao, informa Carmen Larrakoetxea, disponen de un ínfimo 1% de rentabilidad a un año para esa cantidad de dinero. Es decir ganaríamos unos 780 euros, cuando por un depósito de mercado al 2%, nos embolsaríamos hasta 1.560 euros. Por no hablar de las ofertas al 3%, ya numerosas, que nos reportarían 2.330 euros. La gestora comercial remata el tema añadiendo que si queremos más rentabilidad, vayamos al Banco Popular: "Allí están ofreciendo productos muy buenos". Y se queda tan ancha.
La importancia de negociar: Otras visitas, a otras entidades, en cambio, sí van a demostrarnos que influye el tamaño de la inversión. Por ejemplo, en una sucursal de Madrid de Cajamar. La primera de las propuestas que nos hacen es un depósito al 3%, a un año, y domiciliar nómina o pensión como requisito. Cuando informamos de que nuestra intención es depositar 100.000 euros, nos piden tiempo para reformular la oferta. A los dos días llaman: suben el interés a un 3,25% y nos quitan todo tipo de requisitos de vinculación. Resultado, hemos ganado 200 euros de remuneración y nos hemos evitado las engorrosas condiciones.
En nuestras visitas a sucursales de Santander y Banesto confirmamos el 4% que ambas entidades ofrecen a los clientes que negocian en oficina. Entramos en una sucursal de Madrid de la primera de las entidades y la oferta inicial es un 3,25% a un año, informa Paula Hidalgo. Comunicamos nuestra intención de depositar 100.000 euros y el interés se eleva al 4%, aunque con condiciones como domiciliación de nómina, contratación de un seguro, adquirir acciones de la entidad, etc.
La negociación se repite en Banesto. Entramos a sucursales en Madrid y en Valladolid y el primer depósito que nos colocan es el que vincula la rentabilidad del 4% al triunfo de la Selección española.
Un producto que exige además domiciliar dos recibos, contratar una tarjeta de crédito y realizar al menos cinco movimientos al semestre con ella.
Estamos pensando en depositar más cantidad, le comunicamos al subdirector de la sucursal madrileña. "Olvídese de esta oferta entonces", nos responde. "Tenemos un producto nuevo, para importes superiores a 40.000 euros que no tiene ninguna condición. Estoy seguro de que es el mejor producto en estos momentos". La experiencia se repite en Valladolid. El gestor comercial cambió su discurso cuando concretamos la cantidad que queríamos depositar. En ese caso, nada de condiciones, sólo un 2% en caso de cancelación anticipada.
En Barcelona, vivimos una experiencia similar. Volvemos a encontrarnos con el 4% de rentabilidad en una sucursal de Caixa Sabadell. Arranca la negociación con un rango de rentabilidad a 15 meses del 2,8 y el 3%, informa Paula Zapata, pero si nos vinculamos a la entidad domiciliando la nómina y varios recibos podemos aspirar, en principio, a la rentabilidad máxima.
Lo mismo sucede en Caixa Manlleu. El depósito oficial es un 2,3 a un año, informa Jordi Sacristán. ¿Que queremos más rentabilidad? Tenemos que domiciliar la nómina o contratar un plan de pensiones para obtener un 4% a 18 meses. Lo curioso de estas dos cajas catalanas es que no imponen una cantidad mínima para acceder a esta rentabilidad, como en el caso de Santander y Banesto.
En Valencia sí, en Madrid no: hemos comprobado que muchas veces las sucursales de bancos y cajas en una determinada región son capaces de negociar al margen de los productos oficiales de la entidad. Nos ha pasado con La Caixa. En Madrid sólo son capaces de darnos la oferta oficial, el 3% a seis o 12 meses, que se contrata vía Internet. Sin embargo, en una de las de Valencia, informa Javier Alfonso, nos la elevan al 3,75%. Es un producto que se contrata en oficina y parte de un 2%, pero para la cantidad que pedimos llegan a ese tope. Es más, haciendo aportaciones de más de 8.000 euros a un plan de pensiones, llegan al 4%. Es decir, un punto porcentual más de interés, que no es poca cosa. Para los 100.000 euros, supone que pasamos de ganar 2.338 euros a 3.103.
La oferta oficial, la oferta oficiosa: Una de las cosas más desconcertantes que puede sucederle al cliente de banco es comprobar cómo en la negociación con la sucursal de turno, de repente, surgen condiciones inesperadas. El Banco Popular dispone de uno de los mejores depósitos del mercado, un 3,75% a un año que no exige nada más allá de abrir una cuenta corriente, condición sine qua non para todos los depósitos, por otra parte. Sin embargo, hemos podido comprobar que hasta dos sucursales de esta entidad piden adicionalmente la contratación de tarjetas de crédito y débito. En concreto, en una de Valencia, nos piden contratar una tarjeta 4B, que es gratuita el primer año, informa Javier Alfonso. Y en otra de Madrid, una 4B que cuesta 15 euros al mes en concepto de mantenimiento y otra VISA, que es gratuita el primer año. Sin embargo, una de las sucursales de Valladolid ofrecen el 3,75% sin condición alguna. Eso sí, se trata de una oferta cerrada que no varía aunque el capital sean 100.000 euros.
Otra entidad castellanoleonesa, Banco de Castilla, ofrece ese mismo 3,75% a un año, con liquidación mensual de los intereses, una oferta, aseguran que sólo se mantendrá hasta el próximo miércoles y que tampoco varían sea cual sea la cantidad.
Ofertas que cambian cada semana: Si hay algo que empieza a caracterizar el momento actual que vive el mercado de depósitos es incertidumbre. El cierre del grifo en las emisiones de deuda con aval y financiación a tipos fijos previstas en este primer semestre del año pondrá contra las cuerdas a bancos y cajas, que tendrán que apretarse el cinturón y luchar por captar nuevos clientes y retener los que ya tienen. En otras palabras: la política comercial que aplican ahora puede quedar obsoleta de aquí a unos meses. En una de las sucursales de Barcelona de Caixa Girona, nos ofrecen un 3% a 18 meses, pero nos advierten que esta rentabilidad puede variar: "Depende de cuándo nos traiga el dinero", explica la gestora comercial, quien va más allá y cuando nos disponemos a salir añade: "Si le ofrecen más en otro sitio, miro si puedo igualarlo".
Colocar productos estructurados: Una de las constantes cuando la entidad no dispone de un depósito a plazo fijo competitivo es que traten de vender un producto complejo en su lugar. En una sucursal de Bancaja, de Madrid, ya nos lo advierten: "Tenemos un depósito al 3,45% a seis meses pero referenciado a euribor que ha dado buen resultado pero, ya se sabe, rendimientos pasados no garantizan rendimientos futuros".
En la sucursal de Bilbao de Bankoa no aclaran esta cuestión. Preguntamos por un depósito y nos proponen un fondo, el Inverkoa, un producto mixto con la mitad de la inversión en derivados, que aseguran, "ha dado rentabilidades de un 13 y 14%", sin mencionar palabra de los riesgos que se asumen. Tampoco los concretan en otra sucursal de Caja Laboral de Getxo, que nos proponen el depósito Topibex al 12%. Hay que mantener el capital tres años, no hay posibilidad de salida anticipada y está referenciado a Telefónica, Iberdrola y Gas Natural.
También Caja España, en una de sus sucursales de Valladolid, nos proponen el depósito Plazo Bolsa Combinado. A tres meses pagan el 30% a un 4% de interés, pero el 70% restante, que se liquida a 36 meses, está condicionado a la cotización de las acciones de Telefónica.