Vitoria, 17 abr (EFECOM).- El Gobierno Vasco acordó hoy intensificar las labores de inspección y control para impedir la entrada en la Comunidad autónoma y la comercialización de anchoa pescada en Francia, mientras continúe vigente el acuerdo sobre Totales Admisibles de Capturas (TAC) cero.
El consejero de Agricultura del Ejecutivo vasco, Gonzalo Saenz de Samaniego, compareció ante los medios después de la reunión del Consejo de gobierno para dar a conocer este acuerdo que afecta, además de a su Departamento, a los de Comercio y de Interior, a través de la Ertzaintza.
Tanto la Policía autonómica como el personal dependiente de Comercio apoyarán las actuaciones de los inspectores de pesca del Gobierno Vasco.
El fin último de este acuerdo, que tratará de impedir la entrada de anchoa pescada en contra de la reglamentación comunitaria, es "contribuir a recuperar la población de anchoa de la zona CIEM VIII hasta niveles que garanticen su sostenibilidad".
El consejero también recordó que el pleno del Congreso a finales del mes de febrero pasado instó al Gobierno a prohibir la comercialización de la anchoa del Golfo de Vizcaya mientras permanezca una situación de TAC cero para este recurso, prohibición que afectaría a la anchoa capturada a través de pescas experimentales.
El Gobierno Vasco mantiene desde el pasado viernes en "alerta" su inspección pesquera y ayer mismo envió una comunicación al comisario Borj denunciando el "flagrante incumplimiento" por parte de Francia de las obligaciones que le incumbe en virtud del Tratado de la Unión, al haber "habilitado a su flota a realizar una captura incontrolada y ulterior venta comercial en subasta en una pesquería sujeta a TAC cero".
Samaniego explicó que el Gobierno Vasco coincide con el sector y con el Ministerio en que las capturas científicas no podrán tener como destino la comercialización y que los barcos comerciales tendrán que hacer el mismo recorrido que los barcos científicos, para apoyarles en la recogida de muestras, sin rotaciones ni entradas a puerto para descargar.
En este sentido, el consejero vasco dio a conocer que la flota francesa descargó ayer unas siete toneladas de anchoa que no pudieron vender, por lo que se destinó a harina de pescado.
Por ello, reconoció, no se teme que partidas capturadas puedan llegar a comercios del País Vasco, aunque insistió en que se intensificará el control, algo que confía que sirva de "ejemplo" para otras comunidades autónomas.
El consejero vasco de Pesca lamentó que la gestión de la UE en materia pesquera está siendo "cuestionada", no sólo por el sector sino por la sociedad en general, que está "asistiendo atónita a una actuación totalmente irresponsable, unilateral y desafiante de una flota que, con el beneplácito de su Gobierno, parecen buscar el conflicto en la cohabitación pesquera en el Golfo de Vizcaya". EFECOM
jn/mdo