12.000 trabajadores del área de servicio al cliente siguen de huelga este lunes, según el sindicato de servicios Verdi, mientras la dirección de la empresa amenaza a los asalariados con traslados forzosos.
"No hemos recibido ninguna señal que se dirija hacia la dirección correcta", declaró este lunes Lothar Schroeder, negociador del sindicato, poco antes de reemprender las negociaciones en Bonn.
El conflicto entre la dirección y el sindicato está centrado en la prevista externalización de 50.000 empleos en el área del servicios a cliente. Deutsche Telekom quiere asimismo reducir los salarios y aumentar las jornadas laborales.
Si no se alcanza ningún acuerdo, Deutsche Telekom (DTE.XE) amenaza con utilizar la fuerza. En ese caso, los trabajadores serían repartidos a partir del 1 de julio en tres nuevas empresas bajo el nombre genérico de T-Service, declaró Kar-Gerhard Eich, director de personal de Deutsche Telekom.
El sindicato Verdi llamó la semana pasada a los trabajadores a realizar paros de advertencia, mientras que las negociaciones entabladas entre las dos partes sobre la cuestión de la externalización de los empleos han sido infructuosas hasta ahora.
