Pekín, 2 abr (EFECOM).- Algunas de las mayores empresas chinas mostraron interés en participar en el plan contra el cambio climático iniciado por la firma energética pública sueca Vattenfall, y en el que participa también la española Endesa, dijo hoy en Pekín uno de sus responsables.
Con el nombre de "3C Combat Climate Change", esta iniciativa empresarial, a la que la canciller alemana, Angela Merkel, ha dado su bienvenida, busca un modelo para combatir el calentamiento global una vez que expire el protocolo de Kioto en 2012, según explicó en Pekín su "embajador", Orjan Berner.
El modelo es "integrador y a largo plazo" (no en vano está pensado para un período de un siglo), y combina mecanismos de reducción y comercio de emisiones con iniciativas para acelerar el desarrollo tecnológico en la lucha contra el calentamiento.
"Las plantas de carbón en países como India y China existirán en el futuro, hay que buscar técnicas para capturar y enterrar esas emisiones", manifestó Berner.
Hasta el momento 35 empresas, entre ellas Areva, BP, EON AG, Eskom, General Electric o Siemens están involucradas en el plan, cuyo principio es que los países en desarrollo "deben participar aunque sólo comprometerse con las reducciones cuando logren un nivel más alto de crecimiento".
En China, Berner contactó con unas 20 grandes firmas, de las cuales algunas como el primer productor de acero, Baosteel, y la naviera estatal COSCO, mostraron su interés.
De sumarse al proyecto, estas empresas entrarían a formar parte de un grupo de firmas líderes mundiales, con las que participarían en discusiones mundiales y de las que recibirían apoyo para planificar sus propios esfuerzos de reducción de la contaminación.
"Las empresas mundiales deben tomar la responsabilidad. Son parte del problema pero también parte de la solución. Los gobiernos pueden decidir qué hacer, pero las empresas saben cómo hacerlo", subrayó Berner.
El objetivo del proyecto, dijo, es formar un "grupo de opinión" sobre cambio climático, que colabore con los gobiernos, pero que dé a las compañías integrantes la oportunidad también de obtener beneficios.
"No es un secreto que General Electric, por ejemplo, tiene un interés en la reducción de emisiones porque están suministrando los equipos. Al igual que otras muchas compañías que participan tienen un interés comercial", apuntó.
Los responsables del grupo cooperan con la UE Europea e intentarán "influir en sus decisiones para que actúen lo más razonablemente posible", por ejemplo en los métodos que se deberían utilizar para conseguir los objetivos de reducciones de las emisiones contaminantes. EFECOM
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