Cuatro meses después de que Iberia anunciara un ambicioso proyecto para crear una nueva aerolínea de vuelos domésticos y de medio alcance, la propuesta ya ha quedado aparcada.
Según explican fuentes conocedoras del Plan Director 2009-2011, los acontecimientos de las últimas semanas han forzado a dejar en el cajón esta apuesta del gigante aéreopresidido por Antonio Vázquez y que también se barajó en la etapa de Conte. Y la primera causa son las negociaciones de fusión con British Airways.
Aunque Iberia siempre ha presumido de que la puesta en marcha de esta aerolínea para cubrir rutas nacionales y europeas es totalmente independiente del proceso, el gigante británico no ve con buenos ojos la puesta en marcha de una nueva compañía y quiere esperar a cerrar su unión con Iberia para valorar este nuevo escenario.
Se calcula que el proceso de fusión no se cerrará definitivamente hasta el próximo mes de noviembre. Por mucho que quisieran avanzar, sería muy precipitado pensar que en la primera mitad de 2011 pudiera estar lista la nueva aerolínea para intentar ganar clientela en los meses más fuertes del año.
Varias fuentes sindicales consultadas por este periódico corroboran también la teoría de la ralentización de este proyecto , ya que en los últimos encuentros con la aerolínea se ha obviado la cuestión de la creación de una nueva compañía aérea.
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