Bruselas, 29 mar (EFECOM).- La Comisión Europea (CE) propuso hoy suavizar los requisitos medioambientales exigidos actualmente a los agricultores y ganaderos para el cobro de ayudas, de manera que se reduzcan las penalizaciones por infracciones leves.
La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, afirmó que "gracias a esta reforma el sector agrícola será más viable y la Política Agrícola Común (PAC) más acorde con las expectativas de agricultores y contribuyentes".
El Ejecutivo comunitario presentó un informe con el objetivo de mejorar los requisitos medioambientales que deben cumplir los productores, ofreciendo más "tolerancia" para fallos "menores".
El objetivo de esta iniciativa es clarificar ese tipo de exigencias que se imponen a los agricultores para recibir las subvenciones de la PAC, lo que en el sector se conoce como "eco-condicionalidad" o condición ecológica obligatoria.
Para Fischer Boel, el sistema de eco-condicionalidad "ha conseguido hacer la vida de los granjeros más fácil" aunque reconoció que "no todos los Estados miembros lo aplauden".
La CE considera que la aplicación de la eco-condicionalidad hasta la fecha ha generado en ocasiones problemas burocráticos para el productor y la Administración, trabas que se resolverán, según Fisher Boel, con "un mayor margen de tolerancia" a partir de ahora.
Por ello, Bruselas propone que los Estados miembros no emprendan acciones para reducir las ayudas en el caso de que la infracción suponga una penalización inferior al 1 por ciento de la subvención.
Además, la CE quiere establecer una regla "de mínimis" para que no se apliquen reducciones de ayudas inferiores a 50 euros; esto eximiría del recorte del 1 por ciento a agricultores que perciben menos de 5.000 euros.
En esos casos se enviaría una carta de advertencia al agricultor, al que no se el impondría una multa hasta que no reciba una segunda llamada de atención, un sistema que la comisaria ha tachado de "más funcional" porque "no se pueden introducir modificaciones en los cultivos de la noche a la mañana".
Bruselas cree que por ejemplo la pérdida del pasaporte de una ternera no debe ser un motivo de sanción automática, si el ganado se identifica de otra forma.
Asimismo, la CE propuso armonizar los controles e introducir un sistema de aviso hasta 14 días antes de los controles en las explotaciones.
Por otra parte, Bruselas quiere cambiar las reglas para que las inspecciones se concentren más en zonas donde se cumplen menos las normas medioambientales.
Hasta 2005 en la UE se han realizado 240.898 controles, en el 5 por ciento de las explotaciones agrícolas afectadas por la condición ambiental obligatoria, y se redujeron las ayudas en el 11,9 por ciento de los productores sometidos a esa vigilancia.
Los servicios de la comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, pretenden con estas medidas clarificar las condiciones, "armonizar los controles y mejorar la información".
La condición ecológica obligatoria fue uno de los elementos centrales de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), aprobada en 2003.
Significa que para obtener los pagos directos, los productores cumplan ciertas normas sobre salud pública, sanidad animal o vegetal, bienestar del ganado o bien mantener sus parcelas en condiciones agronómicas y medioambientales satisfactorias.
La puesta en marcha de la condición ecológica obligatoria ha provocado reticencias en los países de la UE, tanto por los controles como porque se consideran normas muy "pesadas". EFECOM
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