Philip Morris (Altria), el gigante norteamericano dueño de Marlboro, L&M y Chesterfield, quiere tomar la delantera en la carrera de las fusiones y está buscando para ello la ayuda de Altadis.
La compañía ha contactado ya con bancos de inversión para conocer la disponibilidad de la hispano-francesa a quedarse con parte de los activos de la británica Imperial Tobacco, en el caso de lanzar una oferta por la misma, tal y como publicó a finales de enero Financial Times.
Además de consolidar su posición como segunda del ranking, por detrás sólo del monopolio chino, Philip Morris respondería a Japan Tobacco, que dio un golpe de mano en diciembre con la compra de Gallaher por 14.500 millones de euros. Los analistas creen que uno de los principales obstáculos para llevar a cabo la operación sería BAT, la dueña de Lucky Strike, que, según dicen, estaría preparando también una propuesta por Imperial.
Pero, ¿quién tiene más posibilidades?. BAT no tendría demasiados problemas, pero Philip Morris se encontraría frente a frente con las autoridades europeas de Defensa de la Competencia. "El único sitio donde podrían crecer aún sin necesidad de hacer desinversiones es Reino Unido, pero en todos los demás mercados tendrían que vender activos", reconocen en el sector.
El papel de la hispano-francesa
Y es aquí donde entra Altadis. Philip Morris estaría dispuesto a ceder a su competidora determinados activos, como la alemana Reestsma. La dueña de Fortuna estudió ya en 2001 la compra de esta compañía, que acabó, precisamente, en manos de Imperial. La alianza con Philip Morris le permitiría devolverle ahora el golpe. Y no sólo eso. La británica lleva dos años estudiando la posibilidad de lanzar una opa hostil a Altadis y ésta tiene ahora la oportunidad de cambiar los papeles y pasar de comprado a comprador. A la espera de que se concreten nuevos movimientos, Altadis y Philip Morris guardan silencio.
Los analistas están convencidos, sin embargo, de que se va repetir lo mismo que paso en 1999, cuando una oferta de Japan Tobacco sobre Reynolds International desató una consolidación en el sector con fusiones como la de BAT y Rothmans o Seita y Tabacalera. JPMorgan, por ejemplo, apuesta en uno de sus últimos informes por operaciones en el sector durante el próximo año. Según dice, "Imperial es, dentro de las posibilidades que quedan de recibir una oferta, la más realista". El banco de inversión norteamericano reconoce que Philip Morris podría tener serios problemas de competencia y advierte, de hecho, que Altadis podría ser en este caso una de las soluciones.
Y no es además el único que hace predicciones en este sentido. Otras entidades del tamaño de UBS, Citigroup o Société Générale apuntan también en el mismo sentido. De hecho, UBS va mucho más allá y alerta ya de los países donde la compra de Imperial por parte de Philip Morris afrontaría problemas de competencia. Se trata de Alemania, Holanda, Polonia, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Ucrania y Australia.