El consejo de administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) ha votado a favor de que la constructora de Florentino Pérez pueda ejercer los derechos políticos que le corresponden en la junta de accionistas de Iberdrola. ACS tiene un 12,4% del capital de la eléctrica, un 10% de manera directa y otro 2,4% aparcado mediante derivados.
Con esta decisión, el organismo regulador atiende la petición realizada por ACS amparándose en un hueco legal que existía en la normativa, y al mismo tiempo Iberdrola consigue que la constructora no pueda tener representación en el consejo de administración, ni influir en la estrategia y el pago de dividendos de la compañía.
La votación se resolvió con 8 votos a favor de esta propuesta y uno en contra.

Iberdrola envió un escrito de alegaciones a la CNE el pasado 8 de febrero para reclamar que se cumpliera la ley y que se tuvieran en cuenta los precedentes existentes como el del BBVA, que tuvo que reducir sus derechos políticos en Repsol y luego vender.
De este modo, la eléctrica vasca pedía veladamente que a la constructora de Florentino Pérez no se le permita ejercer más de un 3% de los derechos políticos.
La CNE y ACS, se han a amparado, tal y como adelantó este diario el 9 de octubre en el punto cinco del Real Decreto 6/ 2000 que dice textualmente lo siguiente, el regulador podrá "autorizar, cada una en el ámbito de sus respectivas competencias, el ejercicio de los derechos de voto correspondientes al exceso respecto de las participaciones o la designación de miembros de los órganos de administración, siempre que ello no favorezca el intercambio de información estratégica entre operadores ni implique riesgo de coordinación de sus comportamientos estratégicos".
La intención de la CNE era otorgar derechos a ACS en algunos aspectos concretos como los dividendos, algo que la eléctrica rechaza y que, según las fuentes consultadas, ha sido respaldado por el regulador.