
El crédito malo que hay en los balances de los bancos españoles podría alcanzar los 150.000 millones de euros en 2010. Según un informe de Credit Suisse, la industria puede estar subestimando hasta en un 30% el verdadero nivel de préstamos que pueden incurrir en impago. Las provisiones de la banca crecieron un 33% en junio para afrontar la morosidad.
Si se mantienen las tendencias actuales, el ratio de créditos malos respecto al total de préstamos podría sobrepasar el 8% durante el próximo año, frente al 4,6% que marcó el pasado junio, según el analista de la entidad suiza Santiago López.
La peor recesión que ha vivido España en los últimos 60 años está fomentando el retraso en el pago de los préstamos, lo que hace crecer los costes de cobertura de deuda mala para entidades como Santander (SAN.MC)y BBVA (BBVA.MC), que están adquiriendo activos inmobiliarios para anticiparse a futuros impagos. La práctica de comprar propiedades y reestructurar préstamos es el principal indicador, según Credit Suisse, de que la industria bancaria española subestima la porquería que tiene bajo la alfombra.
Cifras que menosprecian el problema
"El problema de los préstamos peligrosos es mucho mayor, desde nuestro punto de vista. Los bancos pueden manejar la situación, pero las cifras presentadas menosprecian el problema", comenta López.
Según datos del Banco de España, la exposición de los bancos a la construcción, cifrada en 322.000 millones de euros, seguía creciendo a una tasa del 3% interanual el pasado marzo. Esto "sólo puede ser explicado por una significativa actividad de reestructuración de deuda llevada a cabo por muchas entidades", sentencia el analista de Credit Suisse.
Presión sobre los beneficios
Si el crédito malo que hay en el balance de los bancos alcanza los 150.000 millones de euros, será equivalente al total del core capital del sector.
Por si fuera poco, los precios de la vivienda en España "están sólo al inicio de un largo período de ajuste", señalan desde el banco suizo. La caída de los márgenes aumentarán la presión sobre los beneficios y harán caer las ganancias de las entidades en 2010 un 24% frente a las cifras de 2009, advierte López.
Como consecuencia de todo esto, Credit Suisse ha rebajado su recomendación sobre BBVA hasta infraponderar, desde neutral, citando la excesiva concentración de los préstamos de un banco que aún ve pese a todo como "uno de los mejores y con mayor potencial de beneficio de Europa".