
El desembarco de las entidades españolas en tierras en Estados Unidos no es nuevo, pero los últimos movimientos llevados a cabo por los bancos patrios han acabado por llamar la atención de los medios al otro lado del Atlántico. Los expertos aseguran que la banca estadounidense "tiene mucho que aprender" de ellos.
La prestigiosa publicación financiera Forbes se hace eco del avance de los españoles en el sector financiero de Estados Unidos que, junto con instituciones canadienses, han protagonizado diez de las 14 operaciones que se han llevado a cabo desde 2007.
Las últimas compras
El aterrizaje más reciente ha sido el de Banco Sabadell (SAB.MC), que hace un par de semanas acordó la compra del Mellon United National Bank de Florida 142 millones de dólares, que fusionará con TransAtlantic Bank, adquirida en 2007 en el mismo estado. Tras anunciar la operación, la entidad catalana señaló que podría acometer nuevas adquisiciones en la zona, donde ya está presente Banco Popular (POP.MC) desde 2007, cuando se hizo con Total Bank. También en 2007, el BBVA (BBVA.MC) tomó el control de Compass.
El otro gran banco español, Santander (SAN.MC), completó en enero de este año la compra de Sovereign Bancorp, mientras que Caja Madrid cuenta con una participación del 83% en el City Nacional Bank de Florida desde noviembre de 2008. La Caixa también ha intentó plantar su pica en Estados Unidos acercándose a pequeñas entidades como el Dime Bank, aunque las negociaciones no llegaron a cuajar.
De acuerdo con los analistas consultados por Forbes, el boom de la población latina en el sureste de Estados Unidos juega a favor de los bancos españoles, que tienen en el idioma un importante punto de apoyo.
Y si los españoles copan el sur del país, los bancos canadienses pueden presumir de moverse con diligencia por el norte gracias a la proximidad geográfica. Las compras más recientes se llevaron a cabo en 2008: el Toronto-Dominion Bank compró Commerce Bancorp, con sede en New Jersey, mientras que el Alabama Nacional BanCorporation pasó a manos de Royal Bank of Canada.
Al margen de la crisis
Una de las razones por las que canadienses y españoles no han fracasado en su avance en el país es que "no han presionado en exceso a sus filiales para crecer", afirma Gerard Cassidy, analista de banca de RBC Capital Markets, por lo que "no se han visto sobrepasados cuando impactó la crisis financiera", agrega.
Y es que, lejos de ahuyentarles, la crisis que atraviesa el sector bancario estadounidense ha facilitado la entrada en escena de los españoles. "Les da una especie de trampolín para expandirse", explica a Forbes Scott Valentin, de FBR Capital Markets. "Lo que buscan es cuota de mercado", añade.
Por eso, muchos expertos consideran que podrían seguir efectuándose operaciones en los próximos meses, a medida que se vayan asentando las señales positivas en la economía de EEUU, para luego echar el freno en 2011 o 2012.
Cambio de rumbo
Los beneficios de estas adquisiciones son dobles. Por un lado, las entidades que se instalan en Estados Unidos diversifican su actividad y amplían sus fuentes de ingresos. "Buscan firmas que puedan complementarse con sus actuales negocios", apunta Cassidy, de RBC.
Por otra parte, los expertos consideran que la experiencia de los españoles en la banca minorista podría favorecer el cambio de rumbo del sistema financiero estadounidense, que según un estudio reciente de Accenture tenderá hacia esta actividad, sobre todo en el ámbito regional. "Tienen muchas cosas que enseñar a los bancos estadounidenses", señala la consultora.