El consejero delegado de British Airways, Willie Walsh, ha reiterado que no está preparado para aceptar que la aerolínea británica tenga un peso inferior al 53% en el grupo resultante de una combinación con Iberia. Iberia resta poder a los directores generales del grupo.
"Aunque estábamos frustrados por el lento desarrollo, confiamos en que los cambios en la dirección de Iberia anunciados la semana pasada aportarán ímpetu en las negociaciones", ha señalado Martin Broughton, presidente de British Airways, en su discurso ante la junta general de accionistas.
El máximo directivo de la aerolínea agregó que British Airways sigue creyendo en que la propuesta de fusión con Iberia favorecerá los intereses de los accionistas tanto de la aerolínea británica como de la española.
Ampliación de capital
Por otro lado, anunció que la compañía aérea está manteniendo negociaciones con sus inversores institucionales para llevar a cabo una ampliación de capital.
"Estamos negociando con nuestros inversores institucionales para explorar oportunidades en el mercado convertible, que creemos que es la mejor vía para incrementar nuestras reservas de caja", explicó Broughton.
Así, aunque considera que éste no es el momento oportuno para abordar a los mercados financieros, Broughton admitió que hay "cuestiones" que la aerolínea debe resolver en los próximos doce meses y destacó que existen "otras opciones", sin detallar cuáles, para incrementar los fondos a las que British Airways puede recurrir. La liquidez de British Airways está por debajo del "mínimo deseado" del 15% de los ingresos, reconoció.
Revisión del plan de pensiones
Tras admitir el "enorme" déficit del plan de pensiones, señaló que teniendo en cuenta la actual coyuntura, Broughton señaló que la compañía no puede incrementar su contribución y apostó por revisar su estructura. "La compañía y el consejo de administración debe acordar una revisión del plan de pensiones, después de que se complete la valoración actuarial (en otoño)", recalcó el presidente de la aerolínea.
El presidente de la aerolínea recordó que el pasado mes de septiembre el déficit se situaba en los 240 millones de libras (279 millones de euros) para el Plan de Pensiones Aéreo (APS) y en 1.500 millones de libras (1.749 millones de euros) para el Nuevo Plan de Pensiones Aéreo (NAPS).
En el ejercicio hasta marzo de 2009, la valoración contable de los fondos, que se realiza sobre una base diferente, se incrementó en 1.200 millones de libras. "Es probable, por tanto, que la valoración actual se haya agravado por lo menos por esa cantidad", explicó el presidente de la compañía.
Los últimos tres años, British Airways pagó 1.800 millones de libras en dos planes, en un esfuerzo por eliminar el déficit. "Este nivel de contribución está muy por encima de nuestros beneficios acumulados, que ascendieron a 1.000 millones de libras en el mismo periodo", explicó Broughton. Así, el presidente de la aerolínea recordó la importancia del papel del consejo de administración para que la compañía abandone las pérdidas y obtenga beneficios "sustanciales".
En el marco de la junta general de accionistas, el presidente de la compañía, que tampoco pagará dividendo este año, destacó no obstante que la crisis no durará "para siempre". "No importa cuánto de grave sea, esta recesión no durará para siempre. Nuestro desafío ahora es estar en la forma correcta para superar la competencia cuando llegue la recuperación", recalcó.