
Las perdidas de la industria de la aviación superarán este año los 9.000 millones de dólares, casi el doble que su estimación de hace sólo tres meses, a medida que los precios al alza del combustible y la débil demanda crean una crisis sin precedentes para la industria según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
"Es la situación más difícil a la que jamás nos hemos enfrentado", admitió el presidente de la IATA, Giovanni Bisignani, durante la reunión anual que la organización celebra en Malasia.
Hace tres meses, la IATA predijo que las pérdidas para el 2009 llegarían a los 4.700 millones de dólares y redujo las del año anterior de 10.400 a 8.500 millones de dólares a raíz de la crisis económica mundial.
Regulación, impuestos y monopolio
"Nuestro futuro depende de una drástica remodelación, no podemos afrontar los costes de excesiva regulación gubernamental, impuestos y socios abusando de sus poderes como monopolio", dijo Bisignani.
La IATA celebra esta semana en Kuala Lumpur su 65 asamblea general, en la que analiza vías para recuperar la demanda de los pasajeros, que ha caído en los últimos meses un 20%, y qué medidas se deben adoptar a corto y medio plazo para hacer frente a la crisis del sector.
La recesión ha golpeado sobre todo a la primera clase, ya que los viajeros de negocios se han cambiado a los asientos más baratos, lo que ha obligado a British Airways (BAY.LO) y Cathay Pacific Airways.
¿Cambio de rumbo?
John Leahy, director comercial del fabricante de aviones europeo Airbus, dijo que 2009 sería duro, pero que los planes de United Airlines de hacer un pedido de hasta 150 nuevos aviones de Airbus o su rival Boeing (BA.NY) demostraban que el mercado estaba empezando a cambiar de rumbo.
"Las cancelaciones no son tanto un problema como los atrasos. No creo que tengamos muchas más cancelaciones", declaró. Hablando al margen de la reunión poco antes, el presidente de la estatal Air India dijo que su compañía estaba considerando retrasar aviones pedidos a Boeing.
"Estamos mirando opciones, entre ellas volver a fijar una fecha", dijo Arvind Jadhav. "No tengo efectivo, ¿qué esperan que haga?". Cathay Pacific, la mayor aerolínea de Hong Kong, dijo que también quería aplazar más algunas entregas de nuevos aviones ya que no veía indicios de recuperación en su negocio.
Una nota de optimismo, sin embargo, vino de Qatar Airways, que tiene unos 27.000 millones de dólares en pedidos de aviones y quería acelerar entregas, dijo su jefe ejecutivo.
Un desafío
En todo el mundo, se prevé que se entreguen 4.000 aviones en los próximos tres años, lo que supone el 17% de la actual flota, dijo Bisignani. "Una vez más, los aviones pedidos en los buenos tiempos se entregan en recesión. Encontrar clientes para llenarlos será un desafío", declaró.
En un esfuerzo por salir airosas de la crisis, empeorada por el reciente brote del virus de la gripe H1N1, las aerolíneas también han estado intentando reducir costesen todos sitios. Japan Airlines, la mayor aerolínea de Asia por ingresos, dijo que planeaba recortar su capacidad en rutas internacionales un 10 por ciento en el año fiscal que finaliza en marzo de 2010.
Otro problema importante era la subida de los costes del combustible, un problema que sería "irresponsable" que no fuera abordado por los gobiernos, declaró Bisignani.
"El riesgo que hemos visto en las últimas semanas es que incluso el más ligero indicio de esperanza económica hace subir los precios del petróleo. La especulación codiciosa no debe tomar a la economía mundial como rehén".