Empresas y finanzas

La plantilla de BBVA da la espalda al nuevo plan de bajas incentivadas

Las entidades financieras se han puesto manos a la obra para reducir los costes y ser más eficientes. La recomendación del Banco de España ha calado y algunas han presentado modelos novedosos para recortar los gastos, sobre todo, los relativos a la plantilla, que suponen dos tercios de los totales.

BBVA ha propuesto a sus trabajadores una baja temporal, una iniciativa innovadora en el sector. Hace algo más de un mes ofertó a sus empleados la posibilidad de dejar sus puestos de trabajo durante un determinado tiempo, pero el proyecto no está teniendo demasiado éxito. Según fuentes conocedoras, muy pocas personas se han acogido al plan. Ponen como ejemplo Cataluña, donde tan sólo dos trabajadores se han apuntado a las bajas voluntarias.

Recorte del 30% del salario

La plantilla de BBVA con una edad inferior a los 35 años puede dejar su puesto laboral para realizar cursos de formación durante uno o dos años con un sueldo de 6.000 euros. Además, los empleados con una antiguedad mínima de ocho años podrán acogerse al plan durante tres, cuatro o cinco ejercicios con un recorte del salario del 30%, aunque con un suelo garantizado de 12.000 euros. Esta última opción contempla también un seguro sanitario de 3.600 euros.

Estas excedencias laborales se enmarcan dentro del proyecto global de ajustes de gastos de BBVA, por el que cerrará oficinas y disminuirá el volumen de su plantilla. Con esta iniciativa, el banco pretende limitar al máximo las prejubilaciones, que son más costosas, ya que llevan aparejadas la contratación de personal más joven.

Un portavoz del banco indicó que se trata de un complemento a las más de cuarenta medidas de conciliación laboral adoptadas en los últimos tiempos, ya que estas licencias flexibilizan los contratos y permiten a los trabajadores compatibilizar ambos campos de la vida. Además, resalta en ambas opciones que está garantizado el retorno al puesto de trabajo.

Los sindicatos han mostrado su oposición a las bajas incentivadas voluntarias y señalan que este plan se quiere enmascarar con una apuesta por la conciliación. Pero no sólo eso, desde el Gobierno también se criticó la medida. El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, se opuso a la oferta de bajas voluntarias del banco, que tachó de "incompatibles" con otras tomadas en el sector financiero, como el alargamiento de la edad laboral para los presidentes y altos ejecutivos "para garantizar las pensiones".

Mejorar la eficiencia

"Estoy en contra. Creo que en este país se debe combatir la cultura de que cuando se llega a los 50 años el objetivo es una prejubilación, ya sea incentivada o acordada", señaló Corbacho, para decir posteriormente que "estas medidas pueden ser una solución para resolver un problema, pero nunca como cultura".

La entidad pretende disminuir el peso de los gastos de la plantilla -especialmente nóminas- sobre el resto de costes de explotación con el fin de mejorar los niveles de eficiencia. En España éstos representan algo más del 60%, más que en el conjunto del grupo financiero, que ve como el peso se reduce por los menores sueldos en otros países, como los latinoamericanos, donde las retribuciones en general son también inferiores. Así, en México, el segundo mercado en importancia para el negocio de BBVA, el dato se sitúa por debajo del 50%.

El peso de las nóminas

BBVA (BBVA.MC) no es la entidad con el porcentaje de gastos de personal más elevado. El Popular (POP.MC), Caja Madrid y el Pastor (PAS.MC) destinan más dinero a la plantilla en relación al resto de gastos que el banco azul, aunque las cifras no difieren demasiado.

Al igual que el grupo que preside Francisco González, las filiales extranjeras disminuyen el peso de las nóminas en la partida de los costes del Santander. La entidad con el menor porcentaje es Bankinter, muy centrada en la tecnología e Internet en su relación con clientes.

En los últimos meses, BBVA, al igual que la mayor parte de las cajas y los bancos, ha puesto en marcha planes de ajustes de costes, con el consecuente cierre de oficinas. Algunos expertos sostienen que la crisis económica se llevará por delante el 30% de las sucursales, sobre todo de las cajas, que han sido más agresivas en sus plames de expansión comercial por todo el territorio nacional en la época de bonanza.

BBVA ha echado el cierre de 175 oficinas entre octubre del ejercicio pasado y marzo del presente. El banco cuenta con 3.450 oficinas en España, y es la segunda entidad por número de sucursales.

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