
La aerolínea británica registró en su año fiscal 2008 unas pérdidas netas de 375 millones de libras (unos 420 millones de euros), frente a los 712 millones de libras que ganó en el ejercicio anterior. Según han indicado desde British Airways, estas cifras son consecuencia del alza del carburante y la caída de pasajeros. El agujero económico de BA aumenta más de lo que esperaba Iberia.
La deuda de la compañía ascendió a 2.382 millones de libras, frente a los 1.310 millones de un año antes, mientras que los ingresos se elevaron a 8.992 millones de libras (unos 10.071 millones de euros), un 2,7% más.
Por el alza del carburante
Según explica la aerolínea en su nota al regulador, las pérdidas brutas se situaron en 401 millones de libras (unos 449 millones de euros), muy por debajo del beneficio de 922 millones de libras (unos 1.032 millones de euros) registrado en el periodo anterior.
El consejero delegado de BA (BAY.LO), Willie Walsh, señaló que la factura del carburante ascendió en el año a 3.000 millones de libras (3.360 millones de euros) y admitió que la compañía aérea opera en el momento más difícil que haya tenido que afrontar por la desaceleración económica global.
Con estos resultados, la previsión de la propia compañía para el ejercicio fiscal actual no es mejor. "La prolongada naturaleza de la desaceleración global hace que este sea el medio ambiente para operar más difícil que hayamos tenido que afrontar, sin una mejora inmediata visible. Las condiciones del mercado son de desafío", manifestó Walsh.
"Es vital, por lo tanto, que nos mantengamos totalmente comprometidos con nuestros planes de establecer a British Airways como una aerolínea global, de alto rendimiento, centrada en el mercado", añadió.
Medidas para frenar las pérdidas
En cuanto a las negociaciones para la fusión con Iberia (IBLA.MC), el directivo afirmó que siguen su curso, pero tardarán varios meses en concluir. "El principal tema a debatir es el del gobierno corporativo", manifestó.
La compañía explicó también que la aerolínea tomará medidas para "mitigar el impacto de la crisis económica en nuestro negocio". Para empezar, este año "no se puede recomendar el pago de un dividendo", tal y como adelantó su presidente, Martin Broughton.
Además, el próximo invierno reducirá su capacidad a través de la supresión de un 4% de vuelos frente al año pasado, con lo que quedarán en tierra 16 aparatos.
Por otra parte, BA no pagará primas a los gerentes, no elevará los salarios y se ofrecerá al personal la posibilidad de trabajar con reducción de jornada.