
Las ayudas al sector del automóvil puestas en marcha por el Gobierno se han revelado un auténtico fiasco, precisamente cuando en Europa se ve el final del túnel. La estridente diferencia entre el comportamiento en marzo de las ventas de coches en España y Reino Unido -donde se han desplomado entre un 30 y un 40%- y en otros países de Europa, donde se han anotado importantes subidas, dio una lección al Gobierno en dos aspectos.
En primer lugar, ha quedado claro que el Plan Vive no es suficiente para reavivar la demanda del sector en España. En segundo lugar, se ha demostrado que el único revulsivo capaz de surtir efecto, dentro y fuera de nuestro país, es la concesión de ayudas directas con detracciones fiscales a aquellos ciudadanos que decidan sustituir un coche antiguo por uno nuevo.
Las ayudas directas funcionan
Los números, de hecho, no dejan espacio para las dudas. Tres de los cinco grandes países europeos -Alemania, Francia e Italia-, han concedido ayudas directas a la compra de coches nuevos. En concreto, Alemania ha puesto en marcha un robusto plan renove que prevé que los ciudadanos puedan acceder a incentivos de hasta 2.500 euros por automóvil.
Las ventas, que hasta la llegada de los fondos gubernamentales caían con fuerza, en marzo se han disparado un 40% con respecto al mismo mes del año pasado. El efecto de las ayudas se ha hecho sentir de modo contundente también en Francia e Italia. En el país galo, que subvenciona la sustitución de los coches antiguos con 1.000 euros, el mercado se anotó en marzo una subida del 8,1%.
En cuanto al mercado italiano, cerró casi en tablas -con una subida del 0,4%-, gracias a un plan renove dotado con 1.500 euros por automóvil. Además, los pedidos de coches nuevos se han disparado un 30%, un dato que se reflejará en las matriculaciones a lo largo de los próximos meses. Cabe recordar que el mercado transalpino ha sido, hasta la llegada de los incentivos, el segundo más afectado por la crisis, por detrás del español, con porcentajes de caída que superaban el 20%.
Sin ayudas no hay mercado
La situación es exactamente opuesta en los otros dos grandes países europeos -España y el Reino Unido- y en EEUU, que todavía no cuentan con incentivos directos al mercado del automóvil. En marzo los mercados español, británico y estadounidense se dejaron, respectivamente, un 38,7 un 30 y 41% de sus ventas por el camino.
En el caso de España, además, la situación es particularmente crítica porque la caída de este año se suma a la del ejercicio anterior, cuando los números rojos superaron el 28%. Esta situación se ha repercutido sobre el tejido empresarial del sector, en particular los concesionarios, donde hasta ahora se han perdido unos 30.000 puestos de trabajo. Por este motivo, todas las patronales de las cuatro ruedas han apartado sus diferencias para pedir al unísono, a través de la CEOE, que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, conceda ayudas directas al mercado.
Sin embargo, hasta ahora el Gobierno se ha mostrado monolítico en su rechazo a esta opción. Muchos analistas achacan esta rigidez por parte del Ejecutivo a las posturas de dos ministros en particular: Miguel Sebastián y Pedro Solbes. tEl primero siempre ha defendido el Plan Vive -su criatura estrella para el sector del automóvil- como un arma adecuada para combatir la crisis del mercado. Por lo tanto, tener que dar marcha atrás en esta materia sería toda una derrota política para Sebastián.
Por otra parte, Solbes se ha mostrado constantemente reacio a poner en discusión el equilibrio presupuestario para conceder subvenciones y, en este sentido, su sustitución por Elena Salgado al frente del Ministerio de Economía ha sido acogida con esperanza por parte del sector, según fuentes consultadas por elEconomista.
Navarra, una 'isla feliz'
La semana pasada, además, llegó otro dato que ha puesto a los detractores de las ayudas directas entre la espada y la pared.
Las ventas de coches en Navarra -la única región española que concede incentivos directos a la compra de un coche- se han duplicado en los 15 días siguientes a la puesta en marcha del plan regional de ayudas, en comparación con la quincena anterior, según datos del Instituto de Estudios de Automoción a los que tuvo acceso Ep. Este dato es la enésima confirmación de que allá donde se están aplicando, las ayudas directas a las ventas de automóviles sirven para reavivar el mercado, mientras que su ausencia se traduce en un desplome de las ventas.
De hecho, las tres principales organizaciones que representan a los empresarios del sector -Anfac para los fabricantes, Ganvam para los vendedores y Faconauto para los concesionarios- han vuelto a levantar la voz para que esta iniciativa se extienda de Navarra a todo el territorio nacional.