
Gilead entra de lleno en el mercado de antivirales contra el Covid que se usan fuera del hospital tras una ampliación de uso del primer fármaco aprobado contra esta enfermedad en el verano del año 2020: Remdesivir. La FDA de Estados Unidos ha aprobado su uso en pacientes leves que, por sus circunstancias, tienen riesgo de empeorar con la enfermedad. Lo que se busca es evitar precisamente más hospitalizaciones en un entorno marcado por la contundencia de contagios que protagoniza ómicron. Gilead competirá ahora por un mercado en el que ya había dos compañías que habían conseguido el beneplácito de las agencias reguladoras: las norteamericanas Pfizer y MSD.
"Remdesivir ha ayudado hasta ahora a tratar a más de 10 millones de personas en todo el mundo y continúa desempeñando un papel clave para ayudar a reducir la carga de la pandemia. Con base en los datos más recientes, ahora entendemos que también es efectivo en las primeras etapas de la infección, además de ayudar a los pacientes que están hospitalizados con la enfermedad", dijo Daniel O'Day, presidente de la compañía. Gilead, además, también está trabajando en un nuevo antiviral oral (está en Fase I) que se asemejaría más a las pastillas de Pfizer o MSD por el tipo de vía de administración, pero mientras tanto podrán seguir rentabilizando remdesivir, al menos en Estados Unidos.
Tras esta revisión de la FDA, el primer medicamento contra el Covid se podrá usar en los pacientes adultos y pediátricos no hospitalizados (a partir de los 12 años y con un peso mínimo de 40 kg) que tienen un alto riesgo de progresión de la enfermedad con una duración de tratamiento recomendada de tres días para ayudar a prevenir la hospitalización. Para pacientes hospitalizados que no reciben ventilación mecánica se recomienda un ciclo de tratamiento de cinco días, con la opción de extenderse a un total de 10 días según sea necesario.