
La crisis energética comienza a enseñar su peor cara con la llegada del invierno. Los precios de la electricidad han batido esta semana todos los récords existentes en nuestro país y han sobrepasado con fuerza la barrera de los 300 euros/MWh.
La situación, además, apunta hacia un escenario mucho más complicado a principios de 2022, ya que se reducirá, en parte, el impacto de las medidas adoptadas por el Gobierno para hacer frente a esta subida de precios para los usuarios.
Según se desprende de los datos del mercado de futuros de Meff Power para enero, los precios pueden llegar a batir los 356 euros/ MWh en las primeras semanas, un 15% más que el récord alcanzado el jueves de 309 euros/MWh.
A tan solo 15 días de arrancar 2022, la cotización del producto Yr-22 -que marca el precio medio del año- se eleva drásticamente en los mercados de futuros europeos debido al incremento de los precios del gas y del CO2.
En España, el Yr-22 ha subido un 30,3%, hasta alcanzar los 201,5 euros/MWh. En Francia, un 37,2% (229,9 euros/MWh) y en Alemania un 45,6% (205,5 euros/MWh). El elevado precio francés del primer trimestre de 22, que cotiza en 373,12 euros/MWh, apunta a que esta situación de altos precios se mantendrá en los próximos meses.
En 2023 se sitúa en 90 euros/MWh; en 2024 en 65,50 euros/MWh y en 2025 en 55 euros/MWh
Este incremento supondrá, sin ninguna duda, una importante pérdida de competitividad para las compañías y unos recibos notablemente elevados para aquellos consumidores que sigan acogidos a la llamada tarifa regulada PVPC y también a todos aquellos del mercado libre que tengan que revisar sus precios a principios de año.
Según los datos de Meff Power, la previsión de precios para 2023 se sitúa en 90 euros/MWh; en 2024 en 65,50 euros/MWh y en 2025 en 55 euros/MWh. No será hasta 2026 cuando nos acerquemos a un precio medio similar a los registrados durante los últimos años cuando se sitúe en los 46,5 euros/MWh.
En los primeros quince días de diciembre, el precio de la electricidad en el mercado mayorista ha subido un 14,3% respecto a noviembre. Se sitúa en 221,10 euros/MWh, un extraordinario 426% más alto que hace un año. A pesar de ello, los analistas de Grupo ASE señalan que se trata de un precio bajo en el ámbito europeo.
El crecimiento del precio en España es inferior al registrado en el resto de los países de la UE, donde está superando los 300 euros/MWh en los últimos días. Solo Alemania (216,63 euros€/MWh) registra unos niveles más contenidos, por el retorno del carbón a su mix energético. Francia registra un precio de más de 273 euros€/MWh.
Estos precios más contenidos, no obstante, afectan más a España por el tipo de tarifa eléctrica que tenemos y sobre la que el Ministerio todavía no ha dado pistas de si va a acometer cambios.
El Ministerio de Transición Ecológica abrió una consulta pública para reformar el PVPC y, por el momento, no ha vuelto a pronunciarse al respecto sobre los cambios en este tarifa.
Por contra, el que si lo han hecho ha sido la Comisión Europea, fuentes consultadas por este diario, indicaron que la tarifa española no ha recibido la aprobación del Ejecutivo comunitario, tal y como requeriría según lo que indica el Reglamento Europeo.
Mientras se resuelven las disquisiciones regulatorias, en diciembre la producción eólica ha superado los 266 GWh/día, un 60% por encima de la media del mes de diciembre de los últimos 5 años (163 GWh/día). Y no ha tenido más impacto en el precio porque la producción nuclear ha sido un 35% inferior a la del año pasado.
En la primera quincena, dos centrales nucleares aún se encuentran en parada programada. Se espera que a lo largo de este mes el parque pueda estar trabajando a plena carga, aunque Cofrentes ha sufrido un fallo de última hora en su acoplamiento por un disparo, tal y como indicó el Consejo de Seguridad Nuclear.
Esta reducción nuclear ha llevado a que los ciclos combinados de gas hayan incrementado su producción en un 73% y hayan cubierto un 20% del mix de generación. Sus altos costes de producción, dados los elevados precios del gas y de los derechos de emisión de CO2, provocan un fuerte impulso de la cotización de la electricidad en el POOL.
Alza de precios
A lo largo de esta semana y justo en vísperas de Navidad, el precio de la luz ha sufrido máximos históricos consecutivos. Este sábado, a pesar de bajar un 0,9%, se proclama como el primero en la historia en estar por encima de la cota de los 300 euros, situándose a 306,33 euros el megavatio hora, según datos proporcionados por el Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMIE).
El precio de la electricidad en el mercado mayorista de este sábado será un 27,88% más elevado que los 239,53 euros que marcó hace una semana, el 11 de diciembre, y un 34,98% más que los 226,94 euros que alcanzó hace un mes. La diferencia es aún mayor si se compara con otros años. De hecho, el precio medio de la electricidad en el pool del viernes sextuplicó los 49,11 euros que marcó hace un año y casi multiplicará por ocho los 38,65 euros del mismo día de 2019.
Tal y como se está desarrollando el precio en lo que va de mes de diciembre, probablemente este se corone como el más caro de la historia en el mercado eléctrico español. A pesar de la enorme volatilidad, los precios por las nubes, casi siempre por encima de los 200 euros, han predominado. La media supera hasta el momento los 230 euros frente a los 212 euros del pasado mes de octubre.
El encarecimiento del precio en el mercado eléctrico estos últimos meses se debe a principalmente a dos motivos: los altos precios del gas, que se ha multiplicado casi por siete en el último año, situándose el precio de la subasta diaria de Mibgas a 138 euros/Mwh, la caída de los inventarios de gas, que se encuentran un 20% por debajo del año anterior y un 18% por debajo del promedio de los últimos 5 años, ya que los almacenamientos subterráneos del Norte de Europa permanecen particularmente más vacíos que en otras épocas, y los derechos de emisión de dióxido de carbono, que también han alcanzado máximos históricos, pudiendo llegar a los 100 euros/t antes de finales de año, debido a los resultados de la COP26 y los anuncios del tripartito alemán sobre su intención de establecer un límite en el precio del derecho de CO2. La falta de viento también ha contribuido a que esta subida de precios se haya producido.
A todo esto se le suma la parada de la central nuclear de Civaux por fallos en esta y el cierre, por el momento temporal, de otros reactores por razones de seguridad. El 15 de diciembre, EDF informó sobre la aparición de grietas resultantes de un fenómeno de corrosión bajo tensión en el reactor I de la central. En vista del origen inesperado del agrietamiento, EDF ha tomado la decisión de cerrar los reactores de diseño similar. Por ello, dos reactores de la central nuclear de Chooz se apagarán para realizar inspecciones adicionales a las de años anteriores.
La demanda, al máximo
Estos problemas ocurren en un contexto en el que la demanda alcanza su punto máximo y que probablemente acaben repercutiendo en países vecinos al ser Francia exportador clave de electricidad a lugares como Alemania, España, Italia o Gran Bretaña.
A pesar de las medidas tomadas por el Gobierno, como la reducción del IVA al 10%, la suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica, el descuento del impuesto de la electricidad al 0,5% o la contribución de 2.600 millones de euros por parte de las eléctricas procedente de los denominados beneficios caídos del cielo, el Ejecutivo ha advertido de que el precio de la cotización seguirá en cotas elevadas y subiendo, al menos el primer cuatrimestre del año que viene, momento en el que se prevé que estas medidas decaigan.
Así pues, la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, anunciaba el miércoles su intención de lanzar un nuevo paquete de medidas para tratar de contener la fuerte subida de los precios. Ribera aseguró que antes de acabar el año presentará diversas acciones para cumplir con el compromiso del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de lograr un precio de la electricidad similar al del 2018. Además de las medidas ya presentadas y tomadas, en el borrador de la orden se establecen los precios de los cargos del sistema eléctrico a partir de 2022, poniendo sobre la mesa una reducción de los cargos que va desde el 32,8% para los clientes en la tarifa 2.0 TD hasta el 28,98% para la tarifa 6.2 TD que afecta a los clientes industriales. Además, en la orden que prepara el Ejecutivo se ha tenido en cuenta la aprobación de los proyectos de ley por los que se crea el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del sistema eléctrico.
En España, el aumento del precio de la electricidad en el mercado mayorista afecta directamente a los consumidores acogidos a la tarifa regulada, también conocida como Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), lo que suponen algo más de 10 millones, un 11% del consumo y a los grandes clientes que han preferido pagar un precio indexado al pool, en lugar de un precio fijo, que suponen un 10% del consumo eléctrico total, mientras que los que están en el mercado libre (aquellos que negocian el precio con las comercializadoras), unos 17 millones de clientes, están exentos, aunque a largo plazo también sufrirán la subida en el momento en el que deban renegociar sus contratos con la empresa suministradora de energía.