El hombre de Esperanza Aguirre en Caja Madrid, Pablo Abejas, ha dimitido de la presidencia de la Comisión de Control de la entidad para desbloquear el conflicto interno. Ayer, tras consultar las posibilidades de consenso con el resto de representantes, dejó su cargo, que será ocupado por el de más edad, el también afín a la presidenta regional Antonio Cámara.
Esta decisión se produce en la semana en que parece el Aguirre y el líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, se comprometieran a desactivar la guerra en el seno de la entidad para sustituir a Miguel Blesa de la presidencia de la quinta firma financiera española, hasta el punto que podrían modificarse algunos artículos de la ley, aquellos que podrían ser inconstitucionales. Y en la misma semana en que los tribunales han dado la razón al Ejecutivo autonómico en las suspensiones cautelares del miembro de la Comisión de Control, Juan Gómez Castañeda (de IU).
Aunque todavía falta que el pronunciamiento de la Justicia sobre el caso del galladornista Fernando Serrano, el resto de comisionados han entendido que los tribunales han hablado sobre este tema y han impulsado otra vez el entendimiento.
El lunes, si no hay sorpresas de última hora, celebraran el órgano de vigilancia del Consejo de Administración celebrará la primera reunión en dos meses y medio. Al encuentro han sido convocados once miembros. Ni Castañeda ni Serrano podrá acudir, ya que han sido expedientados, al menos, hasta después de verano por saltarse en procedimiento legal en la tensa reunión que bloqueo todo el proceso electoral de la caja.
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