
La escisión del negocio de autocuidado de GSK para comienzos del año que viene cambiará el paradigma de la compañía. En la reunión anual con inversores, la autodenominada 'nueva GSK' pondrá el foco de su negocio en las vacunas y los medicamentos especializados, como por ejemplo los oncológicos. "Los beneficios de la gran transformación que hemos impulsado desde 2017 ahora son claros. Hemos fortalecido nuestra ejecución comercial y de I + D, y hemos transformado la estructura de nuestro grupo y la asignación de capital, mientras impulsamos un cambio cultural profundo con un nuevo liderazgo", explica la CEO Emma Walmsley.
La traducción a estas palabras es generar un crecimiento de las ventas y un crecimiento de las ganancias operativas ajustadas de más del 5% y más del 10%, respectivamente. Y para ello, las vacunas jugarán un papel protagonista. De hecho, como parte de su perspectiva hasta 2026, se espera que las vacunas aumenten las ventas e un dígito alto. Uno de los antígenos que más recorrido puede tener dentro de la cartera de productos aprobados es Shigrix, indicado para prevenir el herpes Zóster. "GSK espera que aumente la demanda de volumen de sus productos, particularmente para Shingrix en los EEUU, ya que se espera que los sistemas de atención médica vuelvan a la normalidad tras la priorización de los gobiernos a los programas de vacunación contra el coronavirus", explican desde la compañía.
La farmacéutica tiene claro que la pandemia mundial ha cambiado los patrones sanitarios. De hecho, afirman que las oportunidades están ahora en la prevención y el tratamiento de enfermedades. "En el centro de todo esto se encuentra el enfoque de I + D de la empresa en la ciencia del sistema inmunológico, la genética humana y las tecnologías avanzadas; y sus capacidades líderes en el mundo en el desarrollo de vacunas y productos farmacéuticos", argumentan desde GSK.
Otros negocios
Junto a las vacunas, la farmacéutica se centra en cuatro áreas terapéuticas fundamentales: enfermedades infecciosas, VIH, Oncología e Inmunología y Respiratoria. En el primero de los segmentos de negocio, la compañía tiene puestas las esperanzas en un tratamiento contra el Covid que ha desarrollado junto a la empresa Vir. Además, GSK ha desarrollado una importante política de desinversiones en los últimos tiempos que le ha permitido también adquirir licencias sobre varias promesas oncológicas. Por último, una de las ramas históricas de la compañía es la respiratoria y la van a potenciar.