El comercio textil en España registró unas ventas de 10.600 millones de euros en el ejercicio de 2020, lo que supone un hundimiento del 41% respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos revelados esta mañana por Eduardo Zamácola, presidente de la patronal Acotex, que tilda la situación de "catastrófica". "Para poder vender esa cantidad ha sido a través de rebajas y campañas muy agresivas, hemos tenido unos márgenes muy pequeños", añade. Respecto a la previsión de 2021, Zamácola señala que "no ha empezado espectacular, pero en mayo hemos registrado el mejor dato de los últimos 15 meses, con una caída del 35,7%.El cierre del año va a depender mucho del ritmo de vacunación y cómo se vaya recuperando la confianza de la gente".
El número de trabajadores se ha reducido en 27.000 personas respecto al dato de 2019 y adelantó que "la caída va a ser mucho mayor, calculamos que el sector va a tener el 25% menos de trabajadores, al final todos los trabajadores que tenemos en erte no van a salir", explica. Esta disminución del número de trabajadores va en línea al número de cierres, que también se han reducido el 25% hasta 44.107 puntos de venta. "Si las ventas no se van recuperando, los cierres van a ir más", adelanta Zamácola.
En este sentido, las grandes cadenas han aguantado mejor el impacto del coronavirus en su negocio, aumentando su cuota de mercado, frente al caso de las tiendas multimarca o especializadas. A nivel online, el presidente de Acotex ha señalado que "parece que se ha comportado mejor, pero el problema es que si te limitan la posibilidad de reunirte con gente o con el teletrabajo, no compras ropa". Zamácola ha señalado el dato de la CNMC del avance del comercio online: "se situaba en torno al 8-10% antes de la pandemia y ahora son casi 2.000 millones del total".