
Ya lo aconsejó en su día el filósofo español José Ortega y Gasset: "Camina lento, no te apresures, que al único lugar a donde tienes que llegar es a ti mismo". Sin embargo los tiempos que hoy vivimos se caracterizan por los deseos de inmediatez, una práctica que no siempre se revela como la más idónea para nuestra vida. De ahí que surjan con fuerza movimientos como el slow food (con el objetivo, desde hace décadas, de salvaguardar los productos y métodos gastronómicos tradicionales en contraposición a la comida rápida), el slow tech (uso inteligente y moderado de las tecnologías) o la apuesta por las denominadas ciudades slow, con más espacios peatonales, pequeños comercios y conciencia medioambiental.
También en el terreno de las finanzas se ha acuñado un término que responde una forma constructiva de entender la inversión que se caracteriza por poner el foco en la serenidad y el buen criterio, alejándose de la velocidad:el slow finance.
La urgencia no es buena consejera. Volviendo a citas de personajes célebres podemos recordar aquel "vísteme despacio que tengo prisa", hoy en el refranero popular español y de origen incierto: Fernando VII, Napoleón Bonaparte o Carlos III, cualquiera de ellos pudo pronunciarlo. También el político estadounidense Benjamin Franklin afirmó que "con paciencia y tranquilidad, se logra todo… y algo más".
Lo cierto es que hoy, una práctica como el slow finance puede ser la mejor alternativa para combatir la bajísima rentabilidad de la Renta Fija, algo que hasta ahora era el refugio de los inversores conservadores. "Si no hay rentabilidad, entonces debe haber paciencia", explican desde Renta 4 Banco, entidad especializada en servicios de inversión con más de 30 años de experiencia. Los tipos negativos hacen extremadamente difícil invertir sin riesgo y, bajo este punto, el slow finance es la única salvación.
Muchos inversores toman decisiones sin análisis ni perspectiva, en momentos de pánico o arrebatos de euforia y haciendo caso a la constante e ingente información de los mercados financieros. Esto se ejemplifica, tal y como recuerda Juan Carlos Ureta, presidente de Renta 4 Banco, en "la caída del Dow Jones, la Bolsa de Nueva York, en el año 1987". Ureta explica que "ese mercado perdió el 25 por ciento de su valor. Lo que se había construido a lo largo de años, en menos de una hora, se cayó". Y es que "en esos momentos tan intensos de pánico no es bueno actuar".
Invertir en el año 2020
Tal y como informan desde Renta 4 Banco, "los fondos de inversión continúan siendo el mejor vehículo", pues diversifican la inversión, salvan en general los vaivenes del mercado y cuentan con una gestión experta, siempre en manos de profesionales que cuidan y analizan cada movimiento. Este producto, además, permite invertir en cualquier parte del mundo. Concretamente, gracias a la plataforma Fondotop, el usuario puede tener acceso a más de 4.000 fondos internacionales.
A la hora de escoger una opción favorable, los inversores tienen que poner el foco en vehículos con buenas rentabilidades y largo track record, cuya gestión haya pasado ya por diversos ciclos del mercado. En este sentido, todos los fondos de Renta 4 Gestora con mayor trayectoria y amplio track record baten a su índice de referencia; casi un imposible en un momento complicado en las bolsas y en contra de lo que dicen las últimas estadísticas.
Y es que, son pocos los fondos de inversión que logran batir a sus índices de referencia, sobre todo cuando se habla de Renta Variable europea. De hecho, según datos de Morningstar solo el 22 por ciento de los fondos bate al EuroStoxx 50 en el año. Además, el estudio Spiva, que elabora la agencia Standar & Poors, refleja que tan solo el 19,8 por ciento logra superar el comportamiento del índice S&P EUROPE 350 a cinco años.
En cuanto a fondos de bolsa española, cerca de un 25 por ciento de los fondos Renta Variable española superan al Ibex en lo que va de año. Y si miramos al S&P Spain BMI (utilizado en el estudio Spiva), con comportamiento similar al índice español, solo logran superarlo un 27 por ciento de los fondos.
Renta 4 Bolsa FI y Renta 4 Valor Europa se posicionan así como un referente en la renta variable, española y europea, con rentabilidades superiores a su benchmark.
La clave: cultivar la paciencia
Desde Renta 4 Banco lo tienen claro: la clave del año es la filosofía slow finance y, para poner en práctica esta forma de hacer, se debe renunciar a las aspiraciones de enriquecerse muy rápidamente y trabajar para construir nuestro patrimonio a lo largo del tiempo; planificar, por tanto, a medio y largo plazo (dejando de lado el vértigo del corto), así como desconectar y romper con la adicción de la información permanente.
Quizás, solo así, cultivando la paciencia y, como bien dijo Ortega y Gasset, caminando sin prisas, podemos llegar a una exitosa meta.