El grupo Sony ha anunciado que en el primer trimestre de su ejercicio fiscal de 2019 su beneficio neto se redujo un 32,8% respecto al mismo período del año pasado, hasta 152.122 millones de yenes (unos 1.258 millones de euros).
Al dar cuenta de los resultados del ejercicio fiscal que comenzó en abril pasado, Sony informó de que entre ese mes y junio su beneficio operativo creció un 18,4% respecto al primer trimestre del ejercicio fiscal de 2018, hasta 230.925 millones de yenes (1.910 millones de euros).
Excluyendo registros contables extraordinarios y su impacto fiscal, como las ganancias bursátiles de su participación en la plataforma de música Spotify anotadas en el primer trimestre de su ejercicio fiscal de 2018, el beneficio neto ajustado tuvo un aumento trimestral del 4%.
Los ingresos de la corporación nipona bajaron entre abril y junio pasados un 1,4%, hasta 1,92 billones de yenes (15.923 millones de euros). Por líneas de negocio, el de productos electrónicos, el que más ingresos generó, tuvo un 14,8% de reducción en sus ventas, hasta 483.915 millones de yenes (4.001 millones de euros).
Por su parte, el sector de juegos y servicios de red también tuvo un descenso trimestral, del 3,1%, hasta 457.461 millones de yenes (3.783 millones de euros). Pero si se tiene en cuenta el beneficio operativo por sectores, el de juegos siguió liderando las cuentas, con 73.804 millones de yenes (610 millones de euros/680 millones de dólares), un 11,6 % menos que en el primer trimestre del ejercicio fiscal de 2018.
Revisión a la baja
En sus proyecciones para el ejercicio de 2019, que cerrará en marzo de 2020, Sony calcula que sus ventas se reducirán un 0,8% respecto al ejercicio fiscal anterior, hasta unos 8,6 billones de yenes (71.073 millones de euros).
Ese cálculo, sin embargo, implica una revisión a la baja del 2,3% respecto al pronóstico de ventas anuales que había hecho en abril pasado. Sony calcula que su beneficio neto anual será de 500.000 millones de yenes (4.132 millones de euros).
