
Andrea González y su hermano Francisco están al frente de Jamonprivé, una web donde comprar ibéricos de primera calidad directamente desde el secadero. Su hermano, desde EEUU, se ocupa de la parte técnica. La programación se realiza en Rumanía y Andrea, vasca asentada en Barcelona, lleva las riendas de todo lo demás.
Cada uno en una punta del mundo... ¿Cómo se coordina un negocio tan internacional?
Los dos somos empresarios y estamos acostumbrados a trabajar con mucha coordinación y tecnología. Trabajamos mucho con Skype. Se dan situaciones graciosas con nuestros horarios tan diferentes. A veces, por ejemplo, yo estoy en el gimnasio y, mientras estiro, estoy hablando con mi hermano en EEUU por videollamada para solucionar el incidente con un transporte. Con la tecnología hoy en día puedes hacer todo desde cualquier sitio.
Habéis eliminado los intermediarios. ¿Cómo y por qué?
En EEUU se llama ecommerce drop-shipping y es un método muy de moda que consiste en mandar productos frescos directamente del proveedor al cliente para que llegue en condiciones óptimas. En España quizás no se estila tanto pero creemos que es una buena idea traerlo al país, primero para garantizar la calidad, y segundo para evitar gastos innecesarios de almacenamiento, lo que a su vez se traduce en mejores precios para los clientes.
Vendéis en toda la Unión Europea. ¿Llegan muchos pedidos de fuera?
Mucho. Vendemos mucho en Italia, sobre todo con el jamón serrano, que se parece al prosciutto, y también en Francia, donde les gusta mucho la pieza entera, paletas ibéricas y también en Inglaterra. De hecho, ahora mismo nos está funcionando mejor la exportación que la venta nacional. También es cierto que ha coincido con el verano, y en los países mediterráneos, con el calor, se consume menos porque los ibéricos sudan y la gente se va de vacaciones. En Navidad esperamos registrar un pico importante en las ventas nacionales, en esa época se da el 60% de la demanda anual.
Y que a los españoles nos cuesta comprar comida por Internet...
Sí. Yo creo que a los españoles nos cuesta comprar cualquier cosa por Internet. Hay mucho miedo y desconfianza todavía en cuanto a la seguridad de los pagos. Pero en EEUU por ejemplo nadie va a la tienda, todo el mundo compra online, y también es bastante frecuente en Europa. Es España aún cuesta, pero poco a poco va cambiando esta tendencia.
¿Qué ofrecéis para que cambie?
En nuestro caso, por ejemplo, tenemos un número de atención al cliente disponible todo el día para que nos puedan llamar si necesita ayuda, que la gente vea que es una empresa real. También vamos a incluir un chat online, porque a lo mejor mucha gente no quiere llamarnos desde fuera de España y necesita saber si el producto va a llegar a tiempo para una cena, para una celebración, etc. Y no sólo para guiar en el proceso de compra, sino también para asesorar en temas de marcas, porque nos hemos dado cuenta de que hay mucha gente en España que no tiene ni idea de la diferencia entre serrano, ibérico, bellota o pata negra.
¿Añadiréis más productos?
Estuvimos pensando en un montón de productos, pero nos dimos cuenta de que no queríamos convertirnos en un supermercado. Queremos centrarnos en productos de la tierra, muy gourmet. A los ibéricos vamos a incorporar el aceite de oliva y el vino, y también haremos cestas de Navidad y otras con opciones de personalización. Queremos centrarnos sobre todo en productos para regalar, porque es súper cómodo, para una boda, para un cumpleaños... Es una gran solución porque con esto aciertas siempre. ¡A todo el mundo le gusta que le regalen jamón!