
El transporte por carretera vuelve a generar un conflicto en el Puerto de Bilbao. En este caso se trata de una huelga de camioneros autónomos contra una compañía específica: Maerks Line, una de las principales operadoras de la dársena bilbaína, a la que acusan de rebajar los precios de tal forma que hacen inviable económicamente el servicio de transporte.
Así y tras comunicárselo oficialmente con un preaviso de huelga, a partir de este viernes, 4 de julio, y con carácter indefinido, los camioneros integrados en la Asociación de Transportistas Autónomos del Puerto de Bilbao (ATAP), que representa al 85% de los autónomos que operan en el puerto, suspenderán "toda actividad laboral y de servicios" para la naviera Maersk Lines.
Federico Landera, presidente de Atap, quiere dejar claro que esta huelga nada tiene que ver con los anteriores conflictos de transportes que hubo en el Puerto de Bilbao y que tantos problemas causaron por actuar como cárteles. En este caso, insiste, "se trata de pura necesidad" por la estrategia que está marcando la naviera Maerks. "Es una compañía muy fuerte y muy grande que está rebajando los precios y encargando el trabajo a empresas ajenas, intermediarias, que lo subcontratan aún en peores condiciones".
Terminar con el 'dumping'
Landera insiste en desvincular la estrategia de Atap (organización creada en la primavera de 2013) de otros sindicatos como Sintrabi o Hegaz.
"Nosotros somos una asociación de profesionales autónomos que tenemos muy claro que hay libertad de mercado. No estamos hablando de fijar tarifas, sino de que no podemos permitir que de modo irracional se bajen los precios y no podamos ni cubrir los costes del transporte. Ahora lo que tenemos es una situación de dumping que se debe erradicar", recalca Federico Landera.
El presidente de Atap hace un relato desgarrador de las condiciones económicas en que se están viendo obligados a trabajar con la naviera Maerks y por eso han decidido no aguantar más.
La decisión de ir a la huelga ha sido tomada por unanimidad entre los miembros de Atap, a la que están asociados 475 camioneros y otros 100 están en espera de poder acceder a la asociación. Este extraño grupo de espera se debe, según explica Landera, a que sólo quiere admitir a profesionales que acepten las reglas del mercado, huyendo de antiguas prácticas que hubo en el Puerto de Bilbao.
Negociar con Maerks
Con el preaviso de huelga, Atap quiere dar una nueva oportunidad a Maerks Line para ver si es posible negociar y llegar a un acuerdo, en el que debieran analizarse los costes reales de los servicios y llegar a acuerdos de precios que hagan rentables los transportes.
La decisión de ir a la huelga la ha respaldado la unanimidad del colectivo de transportistas de Atap y se ha comunicado a la naviera afectada, a la Autoridad Portuaria de Bilbao, a la Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores Portuarios (SAGEP), a la Dirección Provincial de Trabajo del Gobierno vasco, y a la compañía Noatum, que explota la terminal de contenedores desde la que opera Maerks Line.