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Los hosteleros temen volver a recesión del consumo interno

  • La mayor mortalidad se dará en restaurantes de polígonos empresariales
Foto: Archivo

El sector de la hostelería será el más perjudicado por el incremento de las cotizaciones sociales. La Asociación Española de Emisores de Vales de Comida y Otros Servicios (AEEVCOS) ha estimado que las pérdidas en el sector de la hostelería podría suponer la caída del 46% de la facturación del sector. Que en términos absolutos se traduce en 498 millones de euros y un total de 275.000 clientes diarios.

Además, la decisión del ejecutivo no tendría los efectos recaudatorios esperados. Luis Díaz, secretario general de AEEVCOS, explica, además, que de no dar marcha atrás el Estado dejaría de recaudar cerca de cien millones de euros anuales". Juan Ignacio Díaz Bidart, secretario general de Fehrcarem (Federación Española de Cadenas de Restauración Moderna) estima que "la mayor mortalidad de restaurantes tendrá lugar en las zonas en las que existan polígonos empresariales", especialmente en Madrid y Barcelona.

Según sus valoraciones sólo en los restaurantes que representa su Federación se destruirán unos 900 empleos. Una cifra que se queda corta si atendemos a las estimaciones de la AEEVCOS, que calcula se perderían más de 14.000 puestos de trabajo. Y eso sin contar el temor generalizado a que la medida se transponga a la Reforma Fiscal. "De ser así el sector de los vales de comida desaparecería en su totalidad y las pérdidas podrían ser mucho mayores", explica Díaz Bidart.

Efecto rebote

El efecto rebote ya ha empezado a notarse en Cataluña. Desde Pimec, explican que "ya hay empresas que nos han informado de que han eliminado este tipo de cheque" y consideran que el fin de la ayuda supondrá el aumento del consumo de comida en tupper.

El presidente de la Asociación de Hostelería de Castilla y León, Julián Duque, no oculta su preocupación por una medida que "tendrá muchos daños colaterales para un sector que todavía no ha salido de la crisis". Aunque no ofrece el volumen de negocio que para la hostelería regional suponen los vales de comida, se muestra convencido de que su penalización fiscal llevará a que muchas empresas renuncien a ellos.

"Muchos negocios viven de este tipo de clientes. No sé como se atreven a hacer una cosa así cuando los empresarios estamos rascando el céntimo para sobrevivir", asegura. El conocido restaurador segoviano asegura que la "hostelería es un sector que tarda más en entrar en la crisis y también en salir. Ahora somos como una planta tropical que vive en la meseta castellana, somos muy sensibles y cualquier resfriado puede hacer que nos marchitemos".

Quien también está que trina es Antonio de María, presidente de la Patronal de Hostelería Andaluza Horeca. "Las subidas de cotizaciones se aprueban como si estuviéramos en época de vacas gordas. Quienes hemos aguantado los seis años de crisis y esperamos un primer año de cierta recuperación vemos cómo el Gobierno carece de sensibilidad hacia los empresarios". De María se refirió también al estudio que se ha hecho desde este sector a escala nacional sobre el impacto de la cotización de los cobros en especie -como vales de comida por un valor medio de 5 euros- en la hostelería, que podría poner en riesgo unos 100.000 cubiertos que se sirven anualmente.

Incremento de gastos

"Además de la caída de ventas que se estima para la hostelería española, los empresarios de hostelería madrileños verán, paralelamente, incrementados sus gastos de personal en más de 63 millones de euros en 2014, debido a la subida derivada de la cotización del Plus Transporte de sus trabajadores asalariados", denuncian desde la asociación empresarial de hostelería de la Comunidad de Madrid La Viña.

El gasto extra mensual que le supone al empresario la cotización del plus transporte de sus trabajadores es de 40 euros al mes -durante los once meses al año- y se abona a los 145.200 trabajadores de hostelería dados de alta en la Seguridad Social en nuestra región. Este coste supone un total de 63.888.000 millones de euros durante el año 2014. "Esta medida afecta a los empresarios y a los trabajadores", explica José Carlos Ramón, secretario ejecutivo de la Asociación Madrileña de Empresas de Restauración (AMER). "El consumo ya está lo suficientemente bajo como para que ahora cotizen las retribuciones en especie. Si se retiran los ticket restaurante muchos hosteleros lo van a pasar mal". "¿Cómo pueden hablar de reactivar la economía y generar empleo a la vez que se toman estas medidas?".

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