Las organizaciones Top Employers están pasando de estar centradas en todas sus personas a poner el foco en cada uno de los empleados de manera individual, con un nivel cada vez mayor de personalización de la experiencia empleado.
Mejorar la experiencia del empleado es la principal prioridad de la estrategia de personas en las compañías Top Employers en España. Ya lo era el año pasado. La novedad, la tendencia de fondo que observamos ahora, es que el diseño de esta experiencia empleado es cada vez más personalizado, adaptado al perfil de cada uno de los integrantes de la organización.
En los dos primeros análisis anuales que realizamos tras la irrupción de la pandemia, observábamos cómo crecía exponencialmente del proceso de digitalización en la gestión de personas. La tecnología, como todos sabemos, acudió al rescate para garantizar con éxito el funcionamiento de las empresas y llegó para quedarse.
Hoy, tras haber superado diversas etapas de prueba y error, podemos decir que la digitalización en los Recursos Humanos es y será, sin duda, un impulsor clave, pero por sí misma no ofrece garantías de una mayor personalización de la experiencia del empleado. Las organizaciones deben definir cómo esta tecnología ayuda a ofrecer la mejor experiencia a cada uno de sus empleados, de manera estrictamente personalizada, y esto solo puede conseguirse con canales de comunicación bidireccional que garanticen la escucha activa y la participación de los empleados en ámbitos tan diversos como el diseño del entorno de trabajo, la atracción de talento, el modelo de trabajo, el bienestar e incluso la definición del propósito, la esencia misma de la compañía.
Las compañías Top Employers lo han comprendido perfectamente y trabajan en todas estas áreas y muchas otras. Los datos de nuestra última HR best practice survey, con su evaluación de 3600 de todas las organizaciones certificadas, son diáfanos.
Por poner un ejemplo, las organizaciones certificadas avanzan en los modelos híbridos de trabajo, no solo definiendo una política de teletrabajo sino ofreciendo un trayecto del empleado optimizado para el trabajo remoto e incluso permitiéndoles que sean ellos mismos los que gestionen su horario o localización de trabajo.
Otro ámbito cada vez más personalizado es el del aprendizaje y el desarrollo, con el apoyo de recursos tanto digitales (como el portal de carrera interactivo o el auge del microlearning) como personales, con figuras como los coaches, los mentores o los consejeros de carrera, que ayudan a los empleados a desarrollar las competencias y habilidades que necesitarán en el futuro.
O el de las iniciativas de bienestar, preguntando a cada uno de los empleados cuáles son sus necesidades de bienestar e involucrándolos cada vez más en el diseño de los programas de bienestar. Y posteriormente ofreciéndoles una oferta personalizada.
Solo aquellas empresas que trabajen intensamente para ofrecer realmente una experiencia personalizada a sus empleados generarán en ellos la reacción emocional necesaria para crear una cultura ágil y de alto desempeño. ¡Ánimo en la tarea a todos los Top Employers!
