
Cuando realizamos una entrevista de trabajo es frecuente que salgamos con varias preguntas en la cabeza, ¿lo habré hecho bien? ¿volverán a llamarme?, quizás no tenía que haber dicho esto, o creo que se han dado cuenta de lo otro.
Sin embargo, no existe un decálogo que determine que te hará triunfar o no en una entrevista. Cada empresa tiene sus normas y podrá darle, más o menos valor, a determinadas cualidades. No obstante, existe una serie de aspectos generalizados que debes tener en cuenta antes de enfrentarte a una entrevista de trabajo:
1. El primero y el más importante, sé tú mismo. Parece obvio, pero exige mostrarte tal y como eres. Intentar destacar competencias de ti que no te corresponden, puede ser un error, que lejos de beneficiarte, podrá volverse en tu contra en el futuro. Tu experiencia o conocimientos ya han hecho que la empresa ponga los ojos sobre ti. Y en la entrevista solo quieren conocerte un poco más. Indagar en los aspectos de tu curriculum y llegar a competencias personales, que sin duda, serán las que determinen si eres el candidato adecuado.
2. Busca información sobre la empresa. Es clave, investiga sobre sus empleados, sus valores y qué esperan de sus posibles candidatos. Las Redes Sociales o tu propio networking podrán ayudarte a crear un plano inicial de cara a la entrevista. Esta información te permitirá estar más cómodo y, sobre todo te ayudará a guiar tus respuestas.
3. Sé prudente con la vestimenta. No existe una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión. Trata de transmitir una imagen cuidada y profesional, pero siempre usa ropa que te vaya a hacer sentir cómodo. Utiliza colores sencillos y evita cargarte de complementos innecesarios.
4. Controla la puntualidad. Conoce exactamente dónde está la empresa y cuánto tiempo necesitas para llegar. Lo recomendable es llegar cinco minutos antes, no intentes llegar con mucho tiempo de antelación pues dará imagen de nerviosismo e inseguridad. Si por alguna razón inevitable te vas a retrasar, informa con tiempo y pide disculpas. Ser puntual refleja aspectos como el interés, la organización o el compromiso.
5. Deja el nerviosismo a un lado y muéstrate seguro. Transmitir confianza en ti mismo será un factor crucial para que la empresa pueda delegar en ti esas funciones. Demuestra que eres la persona adecuada. Siempre con humildad y sin parecer demasiado agresivo.
6. Intenta ser flexible y adaptable. Durante la entrevista evita mirar al reloj constantemente, transmite al entrevistador que tiene el tiempo que necesite. Por otro lado, demuestra tu capacidad para adaptarte a situaciones novedosas sin mostrar demasiada preocupación por romper con tus rutinas. Evita preguntas centradas en horarios o días de vacaciones si aún no sabes si eres el candidato elegido.
7. Muestra tus puntos fuertes con naturalidad. Para ello, presenta pruebas que los confirmen y situaciones donde el entrevistador pueda comprobar que esos puntos fuertes se ponen en marcha. Aprovecha tus inquietudes y vivencias personales, serán tu valor diferencial. No olvides que la empresa también tratará de obtener información sobre tus áreas de mejora. No obstante, prepara argumentos para defenderlas y muéstralas como retos. Plantea alternativas demostrando que no serán un obstáculo.
8. Cuida tu lenguaje. En muchas ocasiones, puede resultar igual de importante lo qué decimos que cómo lo decimos. Trata de responder de forma clara y concreta, intentando ajustar tu discurso al interlocutor. No respondas con monosílabos, utiliza frases estructuradas, apóyate en ejemplos y vivencias. Intenta despertar interés en los entrevistadores y evita añadir información irrelevante para la posición. El lenguaje corporal ayudará a darle un valor u otro a tus argumentos.
9. Justifica tu motivación al cambio. Sí te encuentras trabajando y al mismo tiempo buscando un cambio de empleo; evita hablar mal de tu actual empresa, de tus jefes o de tus compañeros. Plantea la nueva situación como un reto. El entrevistador trata de confirmar tus perspectivas de futuro.
10. Deja un buen sabor de boca final. Despídete con una sonrisa, da las gracias a los entrevistadores por el tiempo dedicado y el interés que han mostrado en ti. No olvides llevarte la información sobre los siguientes pasos, te ayudará a esperar la respuesta de forma tranquila y hacer un adecuado seguimiento.
Por: Virginia Sesmero. Consultora Senior de Recursos Humanos de Deloitte España