
El mayor número de inspecciones realizadas por la Comunidad de Madrid a las plataformas de transporte da resultados. En 2017, se abrieron 4.202 expedientes sancionadores a Uber y Cabify y se triplicó el número de multas, hasta 905. Sin duda, la cifra de infracciones es elevada. Y más si se compara con otros servicios en los que la vigilancia también aumenta, como los camiones.
Sin duda, Uber y Cabify deben corregir estos fallos que, en su gran mayoría, son burocráticos y de procedimiento. Resultan, por tanto, subsanables con relativa rapidez. Eso sí, mientras se sigan cometiendo, las dos empresas de economía colaborativa deben ser castigadas. De ahí que la pérdida de la licencia durante 12 meses para los Uber y Cabify que infringen la normativa sea comprensible.