
NH rechazó la oferta de fusión de Barceló, lo que no implica que este último grupo hotelero se paralice. Sería inexplicable esa resignación, considerando los 1.500 millones de que Barceló dispone para invertir, como explica en elEconomista su consejero delegado, Raúl González. A esos recursos se suma la experiencia acumulada como un operador de referencia del sector vacacional en destinos premium, como EEUU o el Caribe.
De hecho, la exportación del modelo caribeño resulta muy prometedora en áreas como el Índico, por lo que no debe extrañar que el grupo centre sus objetivos en Asia, sin descuidar otros mercados, como América Latina. Pese a que NH frustró la creación del líder hotelero español, Barceló demuestra que tiene músculo para crecer por sí solo.