Las expectativas sobre las elecciones que EEUU celebra hoy han vuelto a marcar el paso a las bolsas. Si la semana pasada las mejores previsiones para Donald Trump provocaron caídas, ayer el horizonte más propicio que parece afrontar Hillary Clinton estimuló los avances en los mercados estadounidense y europeo. Fueron alzas contundentes, que alejaron de sus soportes al Dax alemán y al Eurostoxx.
Sin duda, hay motivos que alimentan el mayor optimismo sobre Clinton; no en vano el FBI cerró el domingo la reabierta investigación sobre sus correos. Ahora bien, todas las posibilidades ante los comicios siguen abiertas, por lo que los inversores no deben apresurarse a hacer cambios de estrategia y dar por hecho que se ha salvado la tendencia alcista de la bolsa.
