
El tipo de cambio del euro/dólar se disparó ayer de 1,116 a 1,124 billetes verdes en minutos, aunque luego se moderó. Hubo una buena razón: la filtración de debates en el seno del BCE sobre cómo terminar su programa de compras masivas de activos. Sería absurdo creer que ocurrirá próximanente.
Al contrario, lo que el mercado aún espera es que el BCE refuerce sus estímulos. Además, el precedente de EEUU muestra lo complejo y largo de este tipo de procesos. Ahora bien, la filtración debe enmarcarse en un cambio de tendencia que también apuntó el Banco de Japón al comprometerse a que el cupón del bono nipón a 10 años no caiga del 0 por ciento.
Así, los bancos centrales piensan ya en terminar la era del dinero barato, aunque aún tardarán años en completarlo.