
La sede de la Agencia Europea del Medicamento (AEM) está en el aire ya que, tras el referéndum del Brexit, todo apunta a la necesidad de trasladarla desde Londres. Varios países presentan su candidatura, pero ninguno de forma tan desordenada como España. Lejos de seguir el protocolo de proponer una única ciudad, desde nuestro país se postulan 9 ubicaciones, que comprenden desde una autonomía (Galicia) a una gran urbe (Barcelona) pasando por una pequeña localidad (Alcalá de Henares).
Se trata de una propuesta incapaz de competir con las presentadas también para ciudades del peso de París o Milán, y cuyo mal plateamiento asegura que España seguirá teniendo un peso institucional en la UE muy inferior al que corresponde a su importancia económica.