
El Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) lleva camino de perpetuarse, pese a su carácter excepcional, ya que seguirá vigente en 2016, con una aportación de hasta 25.000 millones a las autonomías. De hecho, el mecanismo se afianza aún más, ya que batirá el récord de autonomías a las que atiende, 12, después de que Madrid o La Rioja se sumen a otros territorios ya clásicos como Valencia o Cataluña.
El engrosamiento del número de partícipes es una razón más para que Hacienda se decida a aplicar los controles sobre el uso de esta liquidez a los que jamás recurrió. La indisciplina manifestada en 2015, en la que hasta 13 regiones pueden haber rebasado el tope de déficit y en el que este nivel de Administración fue crucial para disparar la deuda pública, obliga a ello.