Los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social son innegablemente buenos, se deben en buena medida al tirón del turismo y los servicios, como corrobora el hecho de que aumente más la afiliación en las CCAA turísticas. La industria, la construcción y la agricultura, en términos desestacionalizados, siguen destruyendo empleo. De los 115.430 afiliados nuevos en el Régimen General en abril, 64.774 son en hostelería, un sector que va a contribuir a la reducción del paro en los próximos meses y que con ello alentará el consumo. El empleo que se crea es temporal, pero no hay que restarle importancia. Aunque es necesario cambiar de modelo productivo se trata de un dato esperanzador que el Gobierno no debe utilizar electoralmente.