Los planes de pensiones han eclipsado a los programas de empleo que las grandes empresas suelen ofrecer a sus trabajadores como fórmula alternativa a la jubilación. Si hace un año habían perdido atractivo con la prima de riesgo en niveles máximos, en la actualidad han demostrado ser competitivos en términos de rentabilidad gracias a su puesta apuesta por la renta fija española, beneficiada por la caída de la cotización del bono (4,7%). La no existencia de comisiones (de gestión y depósito) abaratan notablemente el producto, que con rentabilidades superiores al 10% se han convertido en una alternativa real de inversión. Sino que se lo digan a Caixa Galicia, cuyo plan acumula un rendimiento del 11,7%.