Alrededor de 11,5 millones de españoles están dispuestos a apoyar empresas y marcas que procuren un mejor estilo de vida y adopten criterios de sostenibilidad. En otros países de nuestro entorno la cifra de consumidores que buscan estos productos es muy superior, lo que convierte una producción respetuosa con el medio ambiente en un factor a tener en consideración en un momento de caída del consumo. Ello se explica porque los criterios de sostenibilidad empiezan a converger con la buena gestión y comparten objetivos: uso eficiente de los recursos, maximización del valor que se aporta e internacionalización. Además, las empresas sostenibles son también en su mayoría rentables y contribuyen al cambio de modelo productivo que precisa el país.