Las cuentas del sistema de pensiones para 2013 presupuestan por segundo año consecutivo que no habrá déficit. La realidad es que recién iniciado el año, las cotizaciones de la Seguridad Social no cubren las prestaciones del sistema. Un problema grave, aunque el Gobierno no lo admita. 2012 se cerró con un déficit de 10.131 millones en el sistema, casi una décima del PIB, y este año el desequilibrio será mayor. Hacienda confía en que la Comisión Europea prorrogue uno o dos años el plazo para que España alcance un déficit del 3% del PIB. Esto permitiría aflorar el desequilibrio de las pensiones sin incrementar el ajuste en el Estado y salir del paso. Pero es un error y un autoengaño seguir sin adoptar medidas de ahorro en Seguridad Social.
