Para frenar el déficit de tarifa eléctrico, que llega a los 25.000 millones de euros, el Gobierno va a reformar la fiscalidad del sector, lo que ayer provocó importantes caídas de las eléctricas en bolsa. El nuevo paquete de medidas que ha preparado asciende a 11.178 millones, de los cuales 2.500 serán asumidos directamente por las eléctricas, 3.729 por la Administración y 3.249 por los consumidores. Las eólicas y fotovoltaicas también sufrirán el varapalo fiscal. Sólo la energía termosolar, en manos de Abengoa, se libra del impacto. Mientras tanto, Bruselas teme el impacto negativo que puede tener sobre las renovables y la incertidumbre que crea para los inversores. Las patronales piden otras fórmulas para evitar el daño al sector y a los consumidores.
