
Desde que Felipe Calderón ordenó la salida del Ejército a las calles y le declaró la guerra a los carteles del narcotráfico, el puerto de Veracruz se convirtió en punto estratégico para los grupos criminales, principalmente para Los Zetas, que lo utilizan como plataforma en el trasiego de cocaína y drogas sintéticas a Estados Unidos y a Europa.
Los constantes enfrentamientos entre células del crimen organizado por el control del negocio colocaron a la entidad como un nuevo escenario en el que la violencia deja cuerpos regados sobre la vía pública, como sucedió en septiembre de 2013 cuando en el municipio de Boca del Río, fueron tirados 35 cuerpos de personas ejecutadas a plena luz del día.
De 2004 a 2010, Veracruz estuvo gobernado por Fidel Herrera Beltrán, quien desde esos años ha sido señalado por permitir la creación de una estructura denominada La Compañía, la cual se formó y creció bajo una figura similar a un "consejo de gobierno" o "junta gerencial".
De acuerdo con información de la PGR y Estados Unidos, desde 2007 se aseguraba que con Herrera Beltrán, dicha estructura operativa estaba constituida por integrantes del cártel del Golfo y su brazo armado en aquel momento, Los Zetas.
Entre los integrantes del grupo estaban, Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta; Jorge Eduardo Costilla Sánchez, El Coss y Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca o El Licenciado.
De acuerdo con datos de la DEA y de la Secretaría de la Defensa Nacional, entre 2006 y 2008 La Compañía también operó en Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Campeche y Yucatán.
En el denominado "Operativo Limpieza" que se aplicó en ese estado, 14 testigos protegidos señalaron que el ex gobernador ofrecía protección a Los Zetas e incluso se reunió con jefes de plaza y líderes del narcotráfico.
En diarios nacionales se registraron reuniones con capos del narcotráfico en el municipio de Chicontepec, en el hotel Mabiel de Coatzacoalcos y otra más días antes de su IV informe de gobierno, en una de sus propiedades ubicada en el fraccionamiento Las Ánimas, donde asistió Miguel Treviño Morales, uno de los principales líderes y fundadores de Los Zetas.
Las cosas llegaron a tal punto que en muchos círculos le han llamado el Z-1.
Otra de las joyas de Fidel Herrera es la elevada deuda en que dejó a Veracruz cuando le pasó el poder a su alumno más destacado, Javier Duarte.
Herrera Beltrán dejó una deuda de 11,000 millones de pesos y Duarte de Ochoa se ha encargado de elevarla a más de 44,000 millones de pesos.
Hoy, ese político y representante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha sido designado por el presidente Enrique Peña Nieto como nuevo cónsul de México en Barcelona, España.
La propia prensa española ha referido a los 14 testigos protegidos y las suposiciones de innumerables víctimas de secuestro y extorsión y el artículo de la revista Forbes que lo ubica como una de las 10 personas más corruptas de México.
Fidel Herrera llegó ayer a la Casa Muley Afid, el palacete que alzó Josep Puig i Cadafalch en el paseo de la Bonanova y tomó protesta como cónsul.
"Hay muchos mexicanos allá, el nombramiento ha sido recibido con mucho entusiasmo", dijo el ex gobernador antes de partir a Barcelona en donde no será cónsul general, sino de carrera, así, su nombramiento no tuvo que pasar la aprobación del Senado.
He asumido la titularidad como Cónsul de México en #Barcelona. https://t.co/zhNnfYAwAf | @SRE_mx pic.twitter.com/SiBNQSJBLz
— Fidel Herrera B. (@FidelHerrera) octubre 19, 2015