
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, oficializó a última hora del viernes en Twitter que Washington había alcanzado un acuerdo con México para frenar la entrada de ilegales que evitará la imposición de aranceles del 5% el próximo lunes.
"Me complace informar que Estados Unidos ha alcanzado un acuerdo con México. Los aranceles programados para ser implementados el lunes en contra de México, quedan suspendidos indefinidamente", señaló el mandatario en una serie de tuits.
El republicano aseguró que México a cambio se ha comprometido a tomar "medidas fuertes" para evitar que la migración ilegal llegue a través de la frontera sur de EEUU. La decisión Trump supone un giro radical tras las duras críticas a México por no haber evitado que los migrantes centroamericanos atravesaran el país para llegar a EEUU.
Esta conclusión alcanzada tras varios días de negociaciones supone también una victoria para el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO), cuya administración ha negociado contrarreloj para que el gobierno estadounidense abandonara su amenaza arancelaria. De esta forma se cancela indefinidamente la imposición de un arancel del 5% a todas las importaciones mexicanas que podría haber llegado a aumentar hasta el 25% en los próximos cuatro meses.
"Los aranceles programados para ser implementados el lunes en contra de México, quedan suspendidos indefinidamente"
Según apunta Bloomberg, los republicanos también han respirado aliviados después de advertir a Trump que los aranceles acabarían por hacer mella en la economía estadounidense dado que México es la segunda mayor fuente de importaciones para EEUU.
En lo que llevamos de año hasta el pasado marzo, las exportaciones de bienes estadounidenses a su vecino del sur han alcanzado los 63.953 millones de dólares mientras que las importaciones de México se situaron en los 86.629 millones de dólares. Además, recordaron al mandatario que el Congreso todavía debe ratificar el nuevo acuerdo de libre comercio tripartito entre EEUU, México y Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés).
El senador republicano por Iowa, Chuck Grassley, quien se había opuesto firmemente a esta medida dado el impacto que hubiera tenido en el estado que representa, indicó en un comunicado nada mas conocerse la decisión que "México lo ha logrado".
Por su parte, el secretario de Exteriores de México, Marcelo Ebrard, quien se encontraba en Washington para las negocaciones, confirmó en un tuit que los aranceles no llegarían a materializarse. "Gracias a todos los que nos han apoyado al darse cuenta de la grandeza de México", dijo.
En un comunicado, el secretario de Estado, Mike Pompeo, dio las gracias a Ebrard "por su ardua labor para negociar un conjunto de obligaciones conjuntas que benefician tanto a EEUU como a México". "EEUU espera trabajar junto a México para cumplir con estos compromisos para que podamos detener la marea de la migración ilegal a través de nuestra frontera sur y hacer que nuestra frontera sea sólida y segura", añadió.
Durante las negociaciones de las últimas jornadas, Washington presionó al gobierno de AMLO para que comenzase a detener a los solicitantes de asilo, además de reforzar la seguridad tanto en su frontera con Guatemala como en los puntos de control a través del país hasta su frontera con EEUU.
El pasado mes de mayo más de 144.000 personas fueron detenidas intentando cruzar ilegalmente la frontera estadounidense o se les denegó la entrada el país, la mayor cantidad de personas en un solo mes de los últimos cinco años, según el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza.
México tomará medidas sin precedentes
Según los compromisos acordados, México tomará medidas sin precedentes para aumentar la aplicación de la ley con el objetivo de frenar la inmigración ilegal, que incluyen el despliegue de su Guardia Nacional en todo el país, dando prioridad a su frontera sur.
El gobierno también tomará medidas decisivas para desmantelar las organizaciones de tráfico y contrabando de personas, así como sus redes financieras y de transporte ilícitas. Además, EEUU y México se comprometieron a fortalecer la cooperación bilateral, incluido el intercambio de información y las acciones coordinadas para proteger mejor y asegurar nuestra frontera común.
Por otro lado, EEUU ampliará de inmediato la implementación de los protocolos de protección al migrante existentes en toda su frontera sur. Esto implica que aquellos inmigrantes ilegales que cruzan la frontera con EEUU en busca de asilo serán devueltos inmediatamente a México, donde podrán esperar la adjudicación de sus solicitudes.
Durante la espera, México autorizará la entrada de todas las personas por razones humanitarias, en cumplimiento de sus obligaciones internacionales, mientras esperan la adjudicación de sus solicitudes de asilo. México también ofrecerá empleo, atención sanitaria y educación. Por su parte, Washington compromete a acelerar la adjudicación de las solicitudes de asilo.
Ambos países también acuerdan que, en el caso de que las medidas adoptadas no ofrezcan os resultados esperados, se tomarán otras acciones. Es por ello que EEUU y México continuarán sus negociaciones sobre cuáles serán los términos de entendimientos adicionales para abordar el flujo de migrantes ilegales que se completarán y anunciarán dentro de 90 días, si fuera necesario.