
El mercado laboral de Reino Unido no refleja las tensiones que vive el país a cuenta del Brexit. La tasa de paro bajó una décima al 4%, en pleno empleo y el nivel más bajo desde 1974, desde septiembre a noviembre. El número de puestos de trabajos creados ascendió a 141.000 empleos, muy por encima de lo creado. Los salarios crecieron al ritmo más alto en los últimos diez años al experimentar un incremento del 3,3%.
El Brexit mantiene la incertidumbre de si el mercado laboral británico seguirá creando empleo a toda máquina y con una mejora de los salarios. La única pega que se puede tener en cuenta es la elevada inflación que se situó en noviembre en el 2,3% y dejó los ingresos reales con un crecimiento del 1,1%. Pese a ello, el salario medio bruto mensual crece al nivel más elevado desde 2016.
La creación de empleo se disparó por encima de 140.000 puestos de trabajo hasta las 32,5 millones de personas trabajando, en los últimos tres meses hasta noviembre. Suponen 328.000 empleos más que el año pasado.
La ONS, la agencia de estadística de Reino Unido, estima que había 1,37 millones de personas desempleadas, lo que supone de una tasa de desempleo del 4%. Son 68.000 parados menos respecto al año pasado. También creció en 100.000 personas la fuerza laboral del país. Las personas inactivas, que no buscan trabajo, descendieron hasta las 8,65 millones de personas.