El presidente electo, Barack Obama, ha anunciado este jueves en Fairfax, Virginia, un nuevo plan de estímulo fiscal contra la crisis. "Nuestros mayores problemas tienen sus raíces en el pasado", ha asegurado el afroamericano, "pero aún podemos recuperarnos".
Barack Obama no se ha andado con rodeos durante su comparecencia de este jueves en Fairfax, Virginia, en la que ha aseverado que el nuevo plan de estímulo debe comenzar ya y que además debe generar al menos 3 millones de empleos.
"Hay millones de estadounidenses tratando de encontrar trabajo y hay mucho que hacer", ha añadido el presidente electo ante la multitud de periodistas que lo escuchaban, "la gran mayoría de empleos creados será en el sector privado".
Una recesión que podría durar años
Barack Obama afirmó que la recesión que vive el país "podría durar años" si no se adoptan medidas como el plan de recuperación que propone, valorado en unos 775.000 millones de dólares.
Obama ha anunciado además que cada estadounidense podrá conocer en qué se está gastando su dinero de sus impuestos.
El presidente electo prometió este jueves que el 95% de las familias del país se beneficiarán con un recorte impositivo de 1.000 dólares en el marco de su plan de recuperación de la economía.
Será "la primera etapa de una reducción impositiva para la clase media que prometí durante la campaña y que se incluirá en nuestro próximo presupuesto", dijo Obama durante un discurso en el que bosquejó su plan para recuperar la economía estadounidense.
Obama, quien asumirá funciones el 20 de enero, explicó que esa reducción de impuestos debía estimular a las familias "a gastar".