
El independentismo quiere volver a la casilla de salida de la legislatura iniciada tras las elecciones del 21-D e intentará investir de nuevo al expresident Carles Puigdemont al frente de la Generalitat. El Parlament constituyó ayer la Comisión del Reglamento, a instancias de JxCat, que deberá nombrar a una ponencia redactora para abordar la renovación de la normativa parlamentaria, que la formación soberanista quiere que incluya la posibilidad de realizar una investidura "telemática" de Puigdemont, actualmente huido en Bélgica para evitar ser juzgado en España.
Prioridad de legislatura
La investidura de Puigdemont a distancia es una de las prioridades del actual presidente catalán, Joaquim Torra, que llegó al Palau de la Generalitat de forma accidental y tras fracasar los nombramientos del propio político gerundense y de los diputados de JxCat Jordi Turull y Jordi Sànchez. La coalición neoconvergente ha tratado de investir a Puigdemont a distancia en dos ocasiones durante esta legislatura.
El primer intento fue el 30 de enero de 2018, cuando el presidente del Parlament, Roger Torrent, de ERC, aplazó el pleno de investidura contra el que pesaba la advertencia de la Justicia, que obligaba a Puigdemont a comparecer presencialmente ante la Cámara catalana y bajo autorización judicial.
El segundo intento fue en mayo, cuando el Parlament aprobó la reforma de la Ley de la Presidencia, que cinco días más tarde fue suspendida por el Tribunal Constitucional. En aquella ocasión, JxCat y ERC desistieron de seguir adelante.
Apoyo de ERC
A pesar de la tensión entre republicanos y neoconvergentes, en esta ocasión ERC facilitará la nueva tentativa de investir a Puigdemont. La portavoz de Esquerra Marta Vilalta aplaudió la idea de JxCat de introducir "vías telemáticas" para nombrar un nuevo president y señaló que esto sería una respuesta a una situación de "represión e injusticia".
Los partidos no independentistas del Parlament se han mostrado contrarios a los reiterados intentos de investir a Puigdemont. Ante la nueva tentativa, la líder de Cs en Cataluña, Inés Arrimadas, lamentó que se pretenda convertir en presidente a "un fugado de la Justicia que está en Waterloo", pese a que la Ley de Presidencia está suspendida por el Tribunal Constitucional.
Por su lado, el diputado del PSC Ferran Pedret recordó que existen informes del Consejo de Garantías Estatutarias y de los letrados del Parlament en contra de la investidura a distancia, y avisó de que sería una "temeridad política" intentar una reforma así.