Barcelona
Los tímidos avances en la operación deshielo iniciada entre el Gobierno y la Genertalitat están tensando todavía más la cuerda entre los principales partidos soberanistas, que ya se encuentran bastante divididos sobre si el procés debe pasar a una fase de pragmatismo o continuar por la vía rupturista. El último desacuerdo se produjo ayer, después de que el PSOE y el PDeCat pactaran en el Congreso aprobar en la sesión de hoy una moción para instar al Gobierno y a la Generalitat a iniciar un diálogo "sin imposiciones ni impedimentos" para que la sociedad catalana pueda "determinar su futuro en el marco del ordenamiento jurídico vigente".
Marcha atrás
Tras el acuerdo, Esquerra avanzó que no votaría a favor de la moción al considerar que el PSOE "pone límites al diálogo" al enmarcar cualquier negociación en el actual marco legal, ya que "la ley es mutable". Ante la abstención prevista por los republicanos, el PDeCat decidió retirar la moción, acusando al PSOE de "jugar con el diálogo" por haber aprobado en el Senado, con Cs, una moción del PP a favor de la unidad de Es- paña y contra la celebración de cualquier referéndum sobre la independencia.
