Con la llegada del verano, mucho son los profesionales que realizan jornada intensiva en estos meses, disponiendo así de más tiempo libre para descansar, desconectar y aprovechar al máximo las tardes soleadas. En concreto, el 39% de la población activa ocupada se benefician de la jornada intensiva en verano, mientras que el 40% reconoce que le gustaría tenerla. Estos datos son extraídos de una encuesta realizada a más de 1.000 empresas y a una muestra representativa de 3.000 individuos de la población activa española y elaborada por InfoJobs la plataforma para la búsqueda de empleo.
El 34% del total de las empresas que cuentan con medidas de conciliación laboral ofrece a sus empleados jornada intensiva en verano. Las grandes empresas son las que aplican este horario en mayor media, el 51% de las empresas de más de 50 trabajadores tienen esta jornada, 33% en el caso de las de 10 a 49 empleados y el 21% cuando se trata de empresas de menos de 10 trabajadores.
Con la jornada intensiva el día empieza más temprano pero a cambio el la hora de salida de la oficina es antes, ofreciendo muchas posibilidades para disfrutar de la tarde.
Nuevo libro: leer en los tiempos libre estimula la creatividad, amplia la mente y nos ayuda a estar mentalmente activo más tiempo.
Maratón de películas o serie: todos tenemos una lista de películas o series pendientes, pues este verano ha llegado el momento de empezar a ver todos los títulos de esa lista.
Modo turista: nadie dijo que no se pudiera jugar a ser turista en tu propia ciudad. Anímate y visita algún museo, alguna atracción, un monumento o, incluso, cógete algún tour guiado.
Hacer ejercicio: ante un montón de tardes libres, no hay excusas válidas para no hacer deporte, cualquier cosa que ponga tu cuerpo en movimiento hará que recargues energías, motivación y entusiasmo.
Reencuentros únicos: no hay mejor oportunidad que un mes con tardes libres para ver a esa persona que nunca logras coincidir.
Extraescolares: Inscríbete a algo que ocupe tus tardes, igual que cuando éramos pequeños.
Naturaleza: cualquier ambiente fuera del de la ciudad es bueno para revitalizarse y recargar energías ya sea un parque, la playa, bosque montaña.
Cada vez más compañeros... comparte con ellos un café, compartís el mismo trabajo, aprovecha los meses de verano para conocerlos mejor así mejorarás tus días en la oficina y harás un ambiente laboral más cómodo.
Mímate: Ponte a ti mismo en primer lugar y dedica alguna tarde a mimarte sin prisas, date un masaje, visita un spa o concédete un capricho.
Descansa: y si no te apetece hacer nada, no lo hagas. Elige un sitio cómodo, en el que te sientas a gusto, y, con una bebida bien fría en la mano, disfruta de la vida.
